TRES

132 6 1
                                    

- Lo siento, olvidé un par de herramientas en tu patio, ¿crees que podrías dármelos? -tardé unos segundos en recordar de quien se trataba, era el mismo chico que había estado podando el césped de mi jardín por la mañana, sus ojos son color avellana- ¿puedo pasar?, o... -lo dejé pasar sin decirle nada.

Lo seguí hasta el patio solo para ver si era cierto que había olvidado algo ahí, pero luego recordé que él había dicho que mi papá le dejo las llaves de la casa para que pudiera hacer su trabajo, tal vez no quiso verse descortés y entrar a una casa como si fuera la suya. Cuando terminó de recoger sus cosas lo acompañé hasta la puerta, todo estaba en silencio hasta que él habló.

- Volveré mañana, tu padre quiere que arregle la tubería y los focos de tu cuarto.

- ¿Y por qué me avisas que harás mañana?

- Calma niña, solo aviso para que no te asustes cuando entre mañana a tu casa -dijo con un tono de arrogancia que me hizo enojar.

- Tengo un nombre tarado -me miró como si esperara a que le dijera algo más, pero cuando vio que no dije nada preguntó por mi nombre- soy Yaneth Miller.

-Zack Kellen, y te soy sincero, tu nombre no me gusta mucho pequeña Miller -con qué derecho dice que mi nombre no le gusta, ¿quién se cree?, nuestra pequeña conversación fue interrumpida por Zizi que estaba gritándome desde mi cuarto- así que Lily eh, jaja... descansa pequeña Miller.

Lo vi alejarse calle abajo y luego cerré la puerta con seguro para poder subir con Zizi que, en mi ausencia, decidió poner la película que ella quiso, nos subimos a mi cama y vimos la película hasta quedarnos dormidas.

꧁꧂

Cerca de las 2:00 de la madrugada mi celular sonó, era una llamada de mi mejor amigo Connor, habló para decir que nos viéramos por la mañana para hablar sobre su cita, se podría decir que él es de ese tipo de hombres que solo tiene citas para no aburrirse, a menudo muchas chicas que quieren algo con él se acercan a mi para poder llegar a él, o a veces me preguntan cómo es que hice para acercarme a él y ser su amiga sin tener que pasar por la famosa "cita de selección". Connor es como ese hermano mayor que nunca tuve (aunque solo sea mayor que yo por un mes). Durante la llamada dijo que pasaría por mí a las 9:30 de la mañana, le dije que estaba con Zizi así que dijo que él llegaría en cuanto ella se fuera. Al terminar de hablar con él volví a dormir y tuve un sueño extraño: Zizi y Connor estaban hablando y riendo, pensé que por fin podrían llevarse bien, pero cuando trataba de acercarme a ellos, había algo que me impedía llegar a ellos, cada que daba un paso adelante, retrocedía tres pasos, hasta que por fin ellos pudieron darse cuenta que yo estaba en la habitación, pero en vez de tratar de acercare, Zion se levantó y se fue, segundos después Connor hizo lo mismo y me quedé sola gritando para que volvieran, pero de repente caí por un abismo hasta que... desperté en el suelo de mi cuarto, al parecer me caí mientras dormía.

Cuando me levanté vi a Zizi aún dormida del otro lado de la cama, decidí darme un baño antes de que ella despertara, quería aclarar mis ideas después de ese sueño raro que tuve, abrí el agua caliente y puse algo de música para sentirme más relajada. Para cuando salí del baño, Zizi estaba husmeando entre mis cajones para tomar algo de mi ropa, bajé a la cocina para preparar algo de desayunar y noté que Zack estaba ahí, él me miró y se le salió una pequeña risa que apenas pude escuchar, tomé dos vasos y serví jugo de naranja, ignorando por completo la presencia de Zack en mi cocina.

- Ay que linda pequeña Miller, pero ya tengo agua -hice como si no lo escuchara, guardé el jugo y tomé los vasos con jugo para poder subir- así que me ignoras, que madura.

Seguí mi camino hasta mi habitación ignorando las palabras de Zack, su arrogancia no me hacía falta esta mañana. No pasaría ni una hora hasta que Zion se fue de mi casa y diez minutos después Connor llegó por mí, traía puesta una camisa casual color negra con estampado, unos jeans y tenis blancos, su cabello castaño oscuro iba desordenado, pero le quedaba increíble, subí a su auto, lo saludé y nos fuimos a hacia ningún lado en específico. Durante el camino me fue contando sobre su última conquista, siempre me pregunta que como sería la cita perfecta, ya que con ninguna de las chicas con las que ha salido se ha sentido bien, pero la verdad es que no sabría bien como contestar a esa pregunta, las únicas dos citas que he tenido han acabado conmigo viendo películas con helado de fresa.

Tal vez, Algún díaWhere stories live. Discover now