La petite Constance.

12.

13 de octubre de 1960 (Nueva York)
Los rayos de sol de la mañana, traspasaban la ventana, dando unos reflejos de luz anaranjados.
Ella, estaba dormida, respirando lentamente. Los rayos, le llegaron hasta sus párpados.
Empezó a molestarle la luz, haciendo que poco a poco despertara. Al abrir completamente los ojos, se incorporó y apoyó su cabeza al cabezal de la cama.
Bostezó, y se frotó los ojos.
Miró el reloj de su muñeca.

___Las diez- dijo entre un suspiro.
Se levantó de su cama, y se fue hacia la cocina.

Todavía seguía medio dormida.
Al pasar en el recibidor, se encontró con un espejo.
Los ojos se le abrieron como platos.
Un vestido rojo le resaltaba, ya seco, y un poco arrugado.
La cara, la tenía con un poco de maquillaje, sobre todo los ojos, que estaban descorridos.

___¿Pero qué? - se rascó la nuca, con desconcierto.

Paseó de un lado a otro, intentando recordar porque estaba vestida así.
Entonces, frenó en seco; se acordó.
Se dió una palmada en la frente.

"La castaña de quedó paralizada cuando el chico llegó y se puso enfrente de ella. Observó sus ojos verdes a la luz de la Luna y él sus ojos marrones y pardos. Él, levantó la barbilla de ella, haciendo que la mirara. Se miraron frente a frente, y cuando Dave acercó el rostro al de Constance, ella olvidó como respirar.
Con un leve suspiro, y el sonido de un trueno en el hermoso cielo, él dijo;
___Te quiero, Constance.
Y con eso, acercó sus labios, y la besó".

Casi se cae de espaldas, con lo que tuvo que apoyarse contra la pared.

___Oh Dios mío - aclaró por fin, con las mejillas sonrojadas- Dave, me besó.

Respiraba a grandes bocanadas,  no se lo creía.
No podía creérselo.
Pensaba que estaba soñando, que era un sueño, pero ella misma empezó a recordar todo lo que pasó ayer.
Una sonrisa boba, le salió al rostro, sin poder evitarlo.
Pronto, empezó a dar saltos de alegría.

____¡Dios mío! ¡He besado a Dave Harrison!- gritó,  haciendo que se oyera en todos los rincones de la casa.

Intentó calmarse, respiró hondo, y con una dulce sonrisita, corrió para dirigirse a la cocina.
Una vez llegada, pudo observar el teléfono y lo cogió.
Tenía muchas ganas de contárselo a él.
Seguro que estaría tan entusiasmado como ella.
Marcó el número de Neil, y no pudo evitar morderse las uñas al escuchar su voz somnolienta.

____Constance, buenos días ¿que tal?- le dijo con una voz un poco ronca.

La castaña, tenía que soltarle ya lo que le había sucedido, estaba apunto de explotar.

____¡Neil!- le gritó con entusiasmo - no sabes lo que me pasó ayer.

Neil, del otro lado, se apartó un poco del teléfono,  tras aquel grito.

___Vas a dejarme sordo- le contestó entre risas- ¿que te pasó ayer?

Constance, respiraba y expiraba, estaba muy contenta y nerviosa a la vez.
Se armó de valor, y se lo dijo.

____Dave... Dave me ha besado.

Silencio.

Constance, se extrañó, no oía la respuesta de su hermano, sólo su respiración lenta y pausada.
Sabía que él no le caía bien Dave, así que puede que le costará asimilarlo.

Después de un tiempo que parecía la eternidad, oyó su voz.

___Me parece que la línea está fallando- su voz tenía algo de enfado- no te he escuchado bien, ¿ que pasó con Dave?

___Me besó - repitió ella con nerviosismo.

Sabía que había desatado el huracán.

____¿Cómo qué te besó? - ella imaginó a su hermano con los puños cerrados y las sienes hinchadas.