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Jung, corría rápidamente por los pasillos de la escuela, no le importaba si algún maestro le regañaba, o si empujaba a alguien, en ese momento lo único que tenía en mente, era que su hermana estaba, en dirección, porque supuestamente había atacado a Jenny.

Ro-Na, había hecho, justo lo que Jung, le había pedido, tantas veces que no hiciera. Meterse en problemas... ¿Lo escucho?, Por supuesto que no, aunque no podía culparla, seguramente Jenny, le había tendido una trampa, o algo por el estilo. Cómo si no la conociera.

Aunque, ese no era el momento de ponerse a discutir, con el mismo, lo único que tenía que hacer, era proteger a su hermana.

Jung, abrió la puerta, de las oficinas sin siquiera pedir permiso, aunque no es como si le importara, o alguien le haya prestado atención, pues lo primero que vio fue como su madre y su hermana estaban siendo atacadas, por la madre Jenny, así que sin pensarlo dos veces. Se metió entre todo ese lío, para evitar que las dos mujeres que amaba más que nadie en este mundo, fueran lastimadas.

-¿Quien es este maldito mocoso?. -Dijo la señora a gritos.

-Jung, ¡¿Que haces aquí?!, vuelve a tu salón. -Le dijo el director.

-¿Para que?... No permitiré que esta mujer maltrate a mi hermana y mi madre. -Dijo mientras se ponía enfrente de ellas.

-Ah... Así que tú eres el hijo de esta mujer tan mal educada, y de esta bully. -Dijo la señora dandole un leve empujón a Jung.

-Cuide sus palabras, mi familia jamás le a faltado el respeto, así que tampoco lo haga con la mía. -Dijo Jung decidido.

-Claro, pero que puedo esperar de alguien, que viene de una familia así, !¡¿Fuiste tú quien le dió la droga, con la que drogaron a mi hija?!.

-¿De que habla, nosotros, jamás drogamos a su hija?.

-Aish, mocosos insolentes. ¡TODO ESTA GRABADO EN VÍDEO, SOLO ESTABAN USTEDES EN EL SALON Y DESPUÉS MI JENNY, TOMO DE SU BEBIDA, Y LUEGO COMENZÓ A ESCUPIR SANGRE!.

-¿Dónde está el vídeo, dónde mi hermana y yo, estamos drogando su bebida?. -Dijo Jung.

-Pequeño mocoso insolente, llamaré al concejo, y me encargaré que los transfieran. -Dijo, nuevamente intentando golpear a Ro-Na, pero Jung, era quien recibía, todos los golpes, y arañazos.

Por su parte entre tanto forcejeo, su madre terminó cayendo, y aunque Jung, estaba dispuesto a ayudarla, está solo se quedó, en el suelo recordando algo. Jung, asustado intento ayudar a su madre, pero no pudo completar su comentado, al sentir una mano impactar sobre su mejilla. Dejando a toda la sala en silencio.

-¡Jung!. -Dijo alarmada Ro-Na, al escuchar, el sonido del golpe. Intentando ver el golpe, pero su hermano, solo la mantuvo detrás de el, para protegerla.

-¡¿Quiere llamar al comité?!, Hágalo, estoy seguro, que no nos dirán nada, nuestras notas son impecables, y no hicimos nada, por lo cual no tenemos nada que temer. Ro-Na, siempre estuvo conmigo, solo nos separamos al momento de ir a clase, y ahí fue donde ustedes la llamaron, para agredirla.

-¿Te sientes muy seguro?... ¡Maldito mocoso!. -Dijo la señora, mientras nuevamente, empujaba a Jung.

-Usted se siente segura, por todo su dinero, y los sobornos que le hace a cada maestro para aprobar a Jenny. No crea que todos nos tragamos el cuento, que su hija es inteligente, cuando sabemos que si aprueba es por los sobornos, que le hace, especialmente al director, pues yo me siento seguro, con mis testigos, donde usted me a agredido, además que tengo pruebas que mi hermana, no drogo a Jenny, no creo que al concejo y a esta escuela, le guste perder a su mejor alumno, que a ido a representar a la escuela en varias competencias nacionales y algunas internacionales, dejándolos siempre en los tres primeros puestos. Y tampoco les conviene perder a una estudiante como mi hermana. Todos en esta sala sabemos, que, mi hermana canta mejor que Jenny, y no es un secreto para nadie, que ella se siente intimidada, por el talento de mi hermana, así que no me extrañaría, que Jenny este fingiendo, o que usted le haya insitado a hacerlo.

En ese momento, la señora Mary, se fue de nuevo encima de Jung, intentando golpearlo nuevamente, mientras que Jung, protegía lo más que podía a Ro-Na, aunque nuevamente la sala volvió a quedar en silencio, al ver cómo la madre de los mellizos, se ponía de rodillas, provocando que los hermanos se mirarán extrañados entre si.

-Disculpeme señora, tiene razón, no hice un buen trabajo, educando a mis hijos, haremos lo que usted nos pida, pero por favor, no llame al comité. -Ro-Na y Jung, fueron rápidamente hacía su madre.

-¡¿Que es lo que estás haciendo?! -Pregunto alterada Ro-Na, pero su madre rápidamente la tomo de la mano.

-Rapido, ofrezcan una disculpa a su amiga, y acabemos con eso. -Ro-Na, rápidamente, se safo del agarre de su madre.

-No, ¡¿Porque Jung y yo tendríamos que disculparnos, por algo que no hicimos?!. -Dijo Ro-Na, tomando nuevamente la mano de su hermano y saliendo, apresuradamente de ahí. Siendo perseguidos por su madre, y siendo alcanzados por esta, en las escaleras.

-Ustedes no entienden, si llaman al comite, los transferirán. Y eso no se verá bien, en su historial académico... Nada de esto hubiera pasado, si no te hubieras unido al club de canto clásico, así que solo discúlpate, y renuncia.

-¡Solo eso es lo único que te importa!... Lo hiciste con Jung, lo obligaste a renunciar a sus sueños, y a estudiar medicina, pero no vas a hacer lo mismo conmigo, no importa cuánto te esfuerces, nunca serás como ellos.

-Ro-Na...

-Aunque papá este muerto... A él siempre le gustaba oírme cantar, y Jung siempre me a apoyado en todo lo que haga. Tú nunca serás como ellos. No importa que nos digas lo que es "mejor para nosotros". Tu solo piensas en ti, sin importar nuestra felicidad. Por eso tú nunca vas a ser como ellos. El puesto de madre, te queda muy grande.

Los quiero mucho cuidense chau ❤️.

Apariencias. (The Penthouse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora