Apariencias. (The Penthouse)

08

Un leve y cálido tacto, despertó a Ha-neul, quien algo extrañada abrió sus ojos, para después cerrarlos bruscamente, al ver que se trataba de su mejor amiga.

-Ha-Neul, tenemos que ir a la escuela.

-Ya se, pero no quiero ir.

-Si no llegamos temprano, nos quedaremos más tiempo, lo sabes.

-Falta media hora, para que lleguemos. -Escucho la voz de su hermano, a lo lejos, así que sin pensarlo más tiempo, solo se levantó de su cama. Y tomo su uniforme, para meterse a bañar.

-Kwan, ¿Porque le dijiste eso, si faltan dos horas, para la entrada?.

-¿Viste como se levantó?... Así se apresura más. Vamos, tenemos que esperarla.

Soyeon asintio, y salieron del cuarto de Ha-neul.

-¿Ya estás mejor?. -Pregunto la chica, a lo que el peli negro solto un suspiro.

-Te mentiría, si te digo que estoy bien del todo, pero el hecho de reconciliarme con Ha-neul, enserio me ayudó bastante... Gracias.

-¿Porque me agradeces?. -Pregunto confundida la fémina.

-Porque sin ti, no hubiera tenido el valor, para decir todo, y que así Ha-neul me perdonará, en serio has hecho tantas cosas, por nosotros que no sé cómo agradecerte.

En el rostro de Soyeon, se dibujo una sonrisa, ante las palabras de Kwan. Soyeon con algo de timidez, acercó su mano, a la de Kwan.

-No es necesario, que me agradezcas, lo hago sin esperar nada a cambio, ustedes son lo más importante para mí. Jamás los dejaría. -Dijo Soyeon con una sonrisa.

-¡Que carajo Chicos! Vamos a tiempo. ¡¿Porque rayos me despiertan así?!.

-Porque tu te tardas en salir, así que es mejor decirte, que falta poco, para que te apresures.

-Eso de mentir no está bien. -Le dijo Ha-neul, a Kwan. Mientras esté se levantaba junto a Soyeon.

-No tendria necesidad de mentir, si tú no te quedarás viendo dramas y leyendo webtoon, a altas horas de la madrugada.

-Ya está bien, ahora solo vamos a la escuela, que si ustedes siguen discutiendo, enserio vamos a llegar tarde. -Dijo Soyeon tomando la mano de Ha-neul, para ir a la escuela.

-¡Ro-Na, deja de correr así de rápido!. -Le dijo Jung.

-A esto le llamo karma hermano. -Dijo la chica riendose entre dientes.

-Pero yo te traje corriendo, porque veníamos tarde, tu me traes corriendo aunque sea temprano y no haya nadie en la escuela. -Dijo Jung.

-Oh, llegaron temprano. -Les dijo el guardia de seguridad a ambos, por lo que rápidamente hicieron una reverencia, y le saludaron con una sonrisa.

Ro-Na, volvió a tomar la mano de Jung, y lo llevo adentro de la escuela, para después dirigirse al salón de música.

-Me vas a ayudar. -Le dijo Ro-Na, a Jung, mientras esté trataba de recuperar el aire. -No seas exagerado, tu eres alguien atlético, ahora vamos. Ayúdame a grabarme, mientras canto. -Le dijo mientras le daba su celular, con la grabadora abierta. Jung asintió con una sonrisa mientras tomaba, asiento en una banca del salón.

Ro-Na, y Jung, se miraron, mientras una sonrisa aparecía en los rostros, de ambos, Jung, asintio, y Ro-Na, sonrió, mientras asentia frenéticamente.

La música de una de las tantas melodías, de ópera, se empezo a hacer presente, en el salón, por supuesto, acompañada, de la bella y angelical voz de Ro-Na.