Eres mía (Pausada)

8. Vamos a bailar

Eren vio a lo lejos la figura de su ex prometida, se sentía muy afortunado, había estado bailando y bebiendo con todo aquello que respirará con la única razón de olvidar a aquella pelinegra, que le había robado el aliento y con ello el corazón.

Aun se sentía muy humillado por todo lo que había pasado en la mañana, cuando Mikasa tiró la sortija que el le había regalado de compromiso ¡Claro que no tenía la razón! Ella no debía de ir ese día, ella tuvo una despedida de soltera, ¿por que el no podía también tener una? Una dónde disfrutará el cuerpo de alguien más, ¿que tenía aquello de malo? Nada

Se comenzó a acercar a ella, y al estar a unos quince metros, notó que no estaba sola, pero aquella no lo detuvo, hasta que unos metros más cerca, reconoció a aquella persona, y por un momento se quedó estático al notar que sus manos estaba unidas, y sus dedos entrelazados, a pesar de que era oscuro, la luz de la barra iluminaba a ambos cuerpos.

Era Jean, el sabia claramente que era el exnovio de Mikasa, ella misma se lo contó antes de que ellos fueran novios, cuando el nivel de amistad y confianza era mutuo y sumamente alto. ¿Cuando fue que aquello acabó?

Se volvió a mover hacía ellos, con pasos fuertes y pesados, hasta que, sintió algo tomarle de la mano. Cierto, el no había llegado solo a aquel bar, ¿en que momento había olvidado que había llegado con Historia?

-¿Dónde mierda andabas, Eren?- La rubia, a pesar de su corta estatura lo jaló hacía ella, y le susurró aquello a su oído- Se tus intenciones, deja a Mikasa tranquila- La rubia tenia aquella solidaridad femenina, y lo cierto era que ella tampoco perdonaría una infidelidad como la qué había hecho Eren. No conocía mucho a Mikasa, pero la había visto varias veces, era una amiga para ella, aunque las veces que hablaban eran pocas, había confianza. Si, siempre supo que enredarse con Eren estaba mal, pero no era sólo su culpa, si Eren de verdad hubiese amado a Mikasa, o más bien, si la hubiese respetado, nunca se hubiera acercado a ella.

Nunca hubiese respondido sus coqueteos y comentarios fuera de lugar, fuera de amistad, fuera de trabajo, fuera de su relación con Mikasa.

Y estuvo bien, que Mikasa se hubiese alejado de el, por que para ella, si Mikasa ese día no hubiese entrado a aquella habitación, aquella escena que afortunadamente Mikasa presencio se hubiese repetido una y mil veces más.

Por que Eren podía amar a Mikasa, pero no la respetaba, y se dio cuenta de aquello, al momento que volvió a la habitación y en lugar de tratar de arreglar las cosas con Mikasa, lo que hizo fue acostarse en la cama con ella, y tiempo después de eso, volver a tener otra ronda.

-Suéltame- Masculló Eren

Historia se tranquilizó, Eren no era del tipo que pensará con cautela cuando tenía tragos en la cabeza, si en estado normal era repulsivo, con tragos era peor.

Comenzó a acariciar la espalda de Eren, y luego rodeo su cuello con su brazo, para después de eso comenzar a besarlo.

Eren por aquel beso deseoso y candente olvidó por completo hacía dónde se dirigía tan solo segundos atrás.

Mikasa se dio vuelta en su banquillo, quería buscar a Hange con la mirada y pedirle que ya se fueran a casa, o que le prestaran las llaves y ella ya se iría. No tenía ánimos de seguir en el lugar, o con Jean a lado y tomados de la mano, pero como la vida es cruel, lo que pudo observar a primera fila y de primer plano, fue otra cosa. Abrió sus ojos en gran tamaño, y se llevó una mano a la boca.

Jean, quien llevaba rato mirándola y apreciando el arte de su mirada, fue testigo de como aquella mirada oscura se llenaba de brillo, si, sus ojos estaban brillosos, pero, ¿por que su cara tenía tanta sorpresa decepción junta? Siguió con la mirada hacía dónde la de Mikasa estaba, y... ¡Vaya! El también abrió los ojos en sorpresa. ¿Aquello que sentía el era lo que sintió Sasha dos años atrás? ¿Qué sentía Mikasa al vivir la infidelidad? ¿Que sentía Mikasa al ser traicionada?