"Lo mas divertido fue que ustedes creyeron que yo jugaba su juego, con sus reglas, cuando en realidad seguían mis reglas sin saberlo, todo este tiempo estuvieron jugando mi juego"
"Carajo..." Pensaste cansada, llevabas al rededor de dos horas intentando violar la seguridad de un nuevo programa gubernamental ruso.
Cada vez que intentabas hackear el servidor principal, o encontrar una puerta trasera, eras enviada a una ventana completamente diferente. No era un trabajo difícil, el problema era el tiempo que debías invertir en bloquear todos los desvíos.
Tus ojos no se despegaban de la pantalla, tus dedos tecleaban códigos con tal de lograr tu objetivo. Hasta que dos manos cubrieron tus ojos e impidieron tu vista, haciendo que los cerraras con fuerza por el cambio de luz.
"¿Tienes idea de la hora que es?" Escuchaste la voz de Kuroo a tus espaldas.
"Muévete! Harás que me expulsen del conducto, estoy a nada de lograrlo" Quitaste sus manos y tomaste un sorbo de la taza de café frente a ti.
"¿Cuánto café has bebido?" Preguntó viendo tres tazas de café vacías esparcidas por la mesa.
"tres, cuatro o cinco, dejé de contarlas, necesito concentrarme, casi llego al servidor central" No despegaste tus ojos de la pantalla ni un segundo, solo escuchaste como el peli negro suspiraba y comenzaba a deambular por el apartamento.
Una vez desviados los seguros, lograste acceder a la red central.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Genial" Una voz monótona llegó a tus oídos.
Volteaste a ver al dueño de aquella voz, un chico de aproximadamente 20 años, cabello negro con las puntas teñidas de amarillo, una mirada felina de color dorado, y una piel blanquecina.
"Quería presentarte a Kenma" Habló Tetsuro una vez que te vio alejar la computadora.
"¿Te quejas de que yo uso la computadora, pero tu quieres presentarme a alguien a las cuatro de la mañana?" Te levantaste del sofá y te acercaste a ambos.
"Ella tiene razón Kuroo, tu lógica no es muy buena" Te respaldó Kozume.
"¿Ahora ustedes son equipo?" Kuroo puso una mano en su pecho y se hizo el ofendido.
"Entonces, tu eres?"
"Kozume Kenma"
"Bueno Kenma, por mas que me gustaría seguir charlando, logre hackear los servidores de los malditos rusos, debo mantenerme oculta y sacar la información que necesito" Volviste al sofá y retomaste tu trabajo.
"Puedo. Puedo ver?" Preguntó en voz baja sentándose a tu lado.
"¿Sabes hackear?"
"Kenma es el mejor con las computadoras" Exclamó Tetsuro desde la cocina mientras 'asaltaba' el bar.
"¿Entonces para que me contrataron?" Dijiste burlona ante sus palabras, no escuchaste respuesta alguna. "Si tienes tu computadora tráela, te enviaré un enlace para que me ayudes con la encriptación del troyano" Le ofreciste.
