¡𝐏𝐎𝐑 𝐅𝐀𝐕𝐎𝐑, 𝐒𝐄𝐍̃𝐎𝐑𝐀 𝐆𝐔𝐈𝐍𝐍! ' HBH + GM

Capítulo 10

18.01.2022

[...]

El sábado ya había llegado, Bahiyyih estaba sentada en la cama de Rui Qi envuelta completamente con una toalla mientras ésta última terminaba de elegir su ropa.

Básicamente es como cuando eras pequeño, terminabas de bañarte y esperabas a que tu madre eligiera tu ropa.

—¿Ya terminaste? Tengo frío —Hizo un puchero mientras intentaba cubrirse aún más con la toalla.

—Falta poco. Estoy demorando porque busco algo de tu estilo y que al mismo
tiempo le agrade a la señora Guinn —Rió mientras tomaba dos camisas —Elige una

—Esa —Apuntó hacia la de la izquierda, era completamente negra.

—Entonces, todo listo —Sonrió levantando su dedo pulgar para después salir de la habitación, cerrando la puerta.

Rápidamente la castaña comenzó a alistarse.

Una vez ya lista se miró al espejo.

No era por presumir, pero se veía muy bien.

La camisa negra metida en su pantalón de mezclilla le hacían ver muy linda, y las Vans que llevaba le daba un toque casual.

Salió de la habitación para mostrarle a Rui Qi.

Esta la miró y sonrió ampliamente.

—Estás guapísima bro, no homo.

—Gracias, gracias —Agradeció riendo.

—Toma, sécate el cabello que después te resfrías —Le entregó el secador que sacó de un cajón.

—Está bien mamá —Giró los ojos aún riendo y fue a la habitación para peinarse.

Después de unos minutos, Bahiyyih estaba completamente lista.

—¿Te lavaste los dientes? —Preguntó la mayor una vez que ya estaban en la puerta.

—Síp

—¿Te echaste cremita?

—Síp

—¿Perfume?

—Ah, eso no —Rió nerviosa.

—Ya lo sabía —Le sonrió y le roció un poco de perfume —¿Estás preparada mentalmente?

–Síp.

—Entonces, ¡Ánimo leona! —Dio unas palmaditas en su espalda e hizo que saliera —Si pasa algo avísame.

—Comprendido, gracias —Levantando su dedo pulgar con una sonrisa llena de seguridad, Huening se encaminó a la residencia Guinn.

[...]

Una nerviosa Myah se paseaba de un lado a otro en su habitación, mirándose cada tres segundos al espejo.

¿Se había manchado? ¿Su ropa se arrugó? ¿Tenía algo en la cara? Se observó detenidamente

Su suave pelo castaño estaba suelto con un pequeño moño rojo en la parte de atrás, llevaba un top color amarillo y unos jeans, junto con unas zapatillas blancas.

¿Por qué estaba tan nerviosa? Sólo saldrían a tomar algo, nada fuera de lo común.

Dio un salto cuando el sonido del timbre retumbó por la casa.

Rápidamente tomó su pequeña cartera blanca y bajó.

Casi le da un paro cuando su madre abrió la puerta.

A paso apresurado se acercó.

—Hola Hiyyih —Saludó a la chica que se encontraba al otro lado de la puerta.

—Hola Myah —Devolvió el saludo con
una sonrisa —Buenas tardes señora Guinn —Hizo una leve reverencia.

—Buenas tardes.

—Saldremos a tomar algo, volveré temprano –Le sonrió a su madre.

—Está bien, ve con cuidado —Depositó un beso en su frente y se apartó para que pudiera salir —Quiero que la traigas en una pieza, Huening.

—No se preocupe, Señora Guinn, se la devolveré temprano y en una sola pieza —Dijo segura de sí.

La señora Guinn le sonrió un poco y cerró la puerta.

—Va- ¿Estás bien? —Preguntó preocupada la castaña menor al ver a la contraria temblar a más no poder.

—¡C-Claro! Vamos antes de que se haga tarde —Tomó la mano de Myah y comenzó a caminar a la tienda de malteadas.

La mente de Bahiyyih estaba hecha una fiesta, es decir, la señora Guinn le había sonreído, mínimo debería durar dos semanas.

[...]

Sí, volví, a esta historia