La Princesa y La Bestia (Camren) G!P

Capitulo 35 *--*SORPRESAAAAAAAA okno.-.*---*

Llegué hasta la puerta de madera. Mi corazón parecía jugar una carrera hasta llegar a mi garganta. Dudé unos segundos antes de empujar la puerta que permanecía sin cerrojo. Di dos pasos y ya me encontraba dentro de la habitación. Suspiré, debía ser más valiente y no una simple niña asustada. Cerré la puerta por donde había entrado y la manta cubriendo mis pies, me jugó una mala pasada haciendo que cayera redonda al suelo.

Lauren:¿Quién esta ahí?-preguntó una voz adormilada y amago a encender la lámpara.

La electricidad se negó a aparecer en la habitación y Lauren se desesperó por eso. Comenzó a apretar el pequeño interruptor con notoria desesperación.

Camila:Soy yo.-respondí con dolor en mi voz. Me acababa de dar un buen porrazo contra la nariz y la barbilla. Mi boca sabía a sangre.

Lauren:¿Camila?-preguntó alarmada.- ¿Qué haces aquí y qué fue ese ruido?-preguntó sentándose en la cama.

Camila:Dolió.-le dije mientras me sentaba sobre el suelo y cruzaba mis pies, acto seguido, cubrí mis dedos helados con la manta.

Lauren:¿Te caíste?-preguntó y segundos después sentí su presencia a mi lado.- Hey, nena, ven aquí.-dijo con ánimos y me envolvió en sus brazos.

Mi cuerpo se tensó y a los segundos se relajó sabiendo que estaba en buenas manos y nada podía ocurrirme. Estar entre sus fuertes brazos me hizo sentir protegida y todo el miedo se esfumó, dejándome tranquila y en paz junto a ella.

Camila:Me duele la barbilla.-me lamenté. Se separó un poco de mi cuerpo y levantó mi barbilla.- Auuch, justo ahí.-dije quitando mi cara de sus manos. Chasqueó la lengua.

Lauren:Creo que no hay luz.-dijo más que acertando.- Y si no me equivoco, te has lastimado la barbilla lo suficiente como para que estés sangrando.-dijo y se puso de pie. Extendió su mano y la tomé.- ¿Se puede saber que hacías?

Camila:Tenía miedo.-admití antes de volver a estrecharla en mis brazos. Sin pensarlo dos veces recibió mi abrazo y agradecí que lo hiciera, pues ya me estaba arrepintiendo de haberla abrazado.

Lauren:Vamos a ver que pasa con la luz.-dijo besando mi frente y luego nos separamos.- ¿Llueve?

Camila:No lo se.-dije levantando la manta del suelo y al ponerme derecha me mareé.

Lauren:¿Estas bien?-preguntó preocupado cuando me afirmé en su hombro.

Camila:Si te digiera que si, estaría mintiendo.-dije con sinceridad.

Lauren:Okay, quédate en la cama, iré a ver que pasó con la luz.-me dijo.

El miedo que antes se había despedido de mí, volvió siniestramente para quedarse. Mis manos sudorosas y temblorosas sobre el hombro de Lauren, se negaron a soltarse y Lauren lo notó.

Lauren:En serio, no estas bien y sin luz no puedo saber qué es lo que te ocurre.-me tomó por la cintura.

Camila:No te alejes.-le dije arrugando mi nariz.

Lauren:Iré a solucionar ese tema y vuelvo.

Camila:No quiero estar sola.-mis ojos se cristalizaron.

Solo veía su silueta a mi lado y sentí sus manos sobre mi cuerpo, pero no podía verla del todo. Pensé que ella me veía igual y por eso fue que no dudé ni un solo segundo en dejar escapar mis lagrimas.

Lauren:En serio, voy y vuelvo. Lo prometo.-me dijo. Asentí y sequé mis lagrimas.- Hey, no, no, no llores.-dijo rápidamente.- Okay, vamos juntas.-tomó mi mano.- Pero vamos rápido, no quiero que te enfermes.

Juntas salimos de la habitación. A la hora de bajar las escaleras, Lauren no dejó de tomarme la mano y me condujo hasta la cocina.

Lauren:Quieta, tengo que salir solo un segundo.-me informó. Asentí con miedo y besó mi mejilla.- En serio, esta todo bien.-secó mis lagrimas y salió por la puerta de madera blanca que daba a una pequeña habitación de servicio.

Camila:Lolo…-la llamé con miedo.

Lauren:Aquí estoy.-respondió al instante.- Ya voy.

Hizo algo con sus manos y a los segundos apretó un interruptor haciendo que la luz volviera a las bombillas colgadas al techo de la casa.

Lauren:Mira cómo tienes la cara.-dijo tomando mis mejillas entre sus manos.- ¿Estas conciente de que sangra tu barbilla?-preguntó. Negué con la cabeza.

Lauren caminó hacía uno de los cajones de la mesada y sacó un paño, lo mojó y lo colocó sobre mi lastimadura. Hice algunas muecas al sentir el roce del líquido sobre mi piel raspada.

Lauren:¿Vas a explicarme cómo te has caído?-preguntó dando pequeños golpecitos en mi raspón.

Camila:Duele, duele.-le dije saliendo de entre sus manos.- Me enredé con la manta y caí.-expliqué. Chasqueó la lengua.

Lauren:¿Dónde te has golpeado?-preguntó tomando mi cara, otra vez.- Déjame curarte.-me dijo cuando intenté zafarme.

Camila:En la nariz y aauuuch, duele.-moví mi cara.

Lauren:Vamos Camz dejame limpiarte allí.-me regañó y nuevamente me tomó la cara.- Quieta y ya terminemos esto de una vez.

Camila:auuuuch camz?.-pregunte por como me llamo

Lauren:tu me llamaste lolo.-dijo encogiendose de hombros.- asi que yo te llamare camz

Me quejé una y mil veces más mientras pasaba el paño sobre mi cara. Renegué un par de veces y Lauren solo respondió chasqueando la lengua.

Lauren:Vamos arriba.-dijo tomando mi mano.

Sin chistar, la seguí. Íbamos apagando luces al pasar. Lauren me condujo hasta su habitación. Cruzamos de largo y entramos al baño.

Lauren:No digas nada.-me advirtió antes de hacerme sentar sobre la tapa del retrete.- Voy a desinfectarte.-soltó mi mano y se puso en cuclillas frente al lavabo. Abrió una pequeña puerta y sacó una cajita blanca.

Camila:Lauren no es necesario.-renegué y me puse de pie.

Lauren:Me gustaba mas Lolo y Quieta.-me dio un leve empujón y quedé sentada nuevamente.

Camila:Es que…

Lauren:Callada y quieta.-ordenó. Suspiré resignada y levanté la barbilla para darle paso al algodón con alcohol.- Así me gusta Camila.-sonrió y comenzó a curar.

Cerré los ojos y contuve las lágrimas al sentir el ardor sobre mi piel lastimada. Lauren hizo lo que pudo en el menor tiempo posible. Colocó una curita sobre mi nuevo raspón y besó mi mejilla.

Lauren:A dormir.-me ordenó.

Camila:Si, déjame que voy por mi manta y bajo.-dije poniéndome de pie. Salí del baño y tras mis pasos, Lauren.

Lauren:Ni pienses en bajar esas escaleras.-dijo abriendo el otro lado de la cama.- Adentro.

Camila:Lauren…-hice el intento de negarme.

Lauren:No voy a dormir aquí si no quieres.-dijo.- Pero tú te quedas a dormir aquí.-hizo un ademán con las manos y me invitó a entrar entre las sabanas.

Camila:No tienes por qué ceder tu cama.

Lauren:Dije adentro.-elevó su tono de voz.- Vamos, no hagas que me arrepienta.

Camila:Okay.-suspiré y me acomodé entre las sabanas.- ¿Iras abajo?-pregunté.

Lauren:Tú tranquila.-su voz era aterciopelada. Tan suave como la brisa y tan pacifica como el correr de un estrecho arrollo.- Hasta mañana.-besó mi frente y apagó la luz central para dejarme con la luz de la lámpara.

Se decidió a dejar la habitación. No podía permitirlo. Mi miedo era mayor que mi orgullo.

Camila:¿Puedes quedarte?-pregunté mirándola. Volteó a verme y sonrió.

Lauren:¿Segura?-enarcó una ceja, que sexy.

Camila:Segura.-asentí.

Se volvió por donde había amagado a salir y se metió en la cama, no sin antes apagar la luz de la pequeña lámpara. Se cubrió con las sábanas provocando que un aire fresco jugueteara entre nosotras. Me removí entre las sábanas e intenté no pensar en el dolor que me provocaba la abertura debajo de mi boca.

Lauren:Hasta mañana Camila, que descanses.-me deseó las buenas noches con una dulce y aterciopelada voz.

Quedé casi inconciente cuando se removió entre las sábanas y se puso de costado para observarme. Seguí con la mirada sobre el techo y le dediqué una sonrisa de costado.

Camila:Hasta mañana Jauregui.-dije luego de pensarlo unos segundos.

Soltó una tierna risa y cerró sus ojos. Le di la espalda y sentí como ella volvía a moverse. Cerré mis ojos intentando conciliar el sueño, que pronto se apoderó de mi, haciéndome desconectar del mundo entero.

Abrí los ojos a causa de unos molestos y fuertes ruidos.

Camila:Maldición.-dije al sentarme en la cama.

El lugar de Lauren permanecía vacío. ¿Dónde podría estar? Y el dilema fue resuelto en solo unos segundos, cuando Lauren salió del baño con una toalla alrededor de su cuerpo.

Lauren:Buenos días.-dijo haciendo que quedara completamente perpleja.

Camila:Buenos días.-respondí conciente de que debajo de esa toalla blanca, estaba completamente, desnuda.

Lauren:¿Has dormido bien?-preguntó revolviendo en su armario.

Camila:Si.-respondí con nerviosismo.- ¿Tú?

Lauren:Muy bien.-me dijo y sacó un pantalón oscuro junto con una camisa blanca.

Me puse de pie y caminé hacía el baño. Busqué una toalla con la mirada pero no la encontré.

Camila:¿Hay toallas?-pregunté mirándola desde la puerta del baño.

Lauren:Si, busca en el pequeño armario.-dijo.

Dicho esto, caminé hasta allí y al abrirlo, efectivamente, estaban allí. Había de muchos colores y tamaños. Tomé una verde claro y una celeste para el cabello.

Lauren:Te espero abajo para desayunar.-me dijo antes de salir de la habitación.