MARATON 1/2
(Eleanor)
"La peor soledad es estar con alguien y sin embargo sentirse solo" nunca estuve tan de acuerdo con un puñado de palabras. Es lamentable sentirse identificado con esa frase, pero es real. Todos nos pasamos la vida buscando, desesperados, ese "algo" que nos complementa, nos tropezamos y caemos en el intento, con la excusa de que valdrá la pena el resultado. Pero, ¿Quién te asegura que haya un resultado después de todo eso?¿Y si ese "algo" nunca existió, y simplemente estás gastando tu tiempo buscando algo que no te pertenece?. Los humanos a veces podemos llegar a ser demasiado estúpidos con respecto a eso, tratan de no pensar en lo negativo, como si así lograsen que desapareciera.
Nuestra vida está compuesta de pequeños momentos. Y con cada elección y decisión nos definimos. ¿Estamos orgullosos de lo que nosotros somos o decepcionados de quien nos hemos convertido?. La vida raramente resulta del modo en la que la planeamos. Lo nuevo ocurre y nos sorprende con nuevas decisiones y emocionantes posibilidades. Pero tarde o temprano la realidad te golpea en la cara.
Suspire mientras colocaba el plato en su lugar.
Mi primer día en la cafetería se resumía en, mesas que limpiar, pedidos que anotar, adolescentes que soportar y un jefe al que trato de ignorar.
Limpié la última mesa, y me dirigí al almacén. Apenas eran las siete menos diez y ya estaba cansada, solo quería llegar a mi habitación y fusionarme con la cama por el resto de mis días. Esto de ser camarera era agotador, yo al principio, antes de ser contratada pensé que se trataba solo de limpiar mesas, y traer pedidos, que ilusa que era.
No volví a mencionar el tema de Spencer en ningún momento, ya que se notaba que Lara aún tenía mucho que pensar. Pero aun así, no pude dejar de procesar sus palabras durante toda la tarde. Para nadie era un secreto que nuestro nuevo jefe tenía favorito, corrección, favorita.
Me adentre al almacén soltando un bostezo. Me estaba quitando el delantal cuando me di cuenta de que no estaba sola ahí.
–Si, te avisaré de lo que sea no te preocupes– pude distinguir la voz de Ethan– que si pesado, ¿algo más?– sin duda era Ethan pero ¿con quien hablaba?– Alex no me toques las narices, si te he dicho que si, es que si.– ¿estará hablando por teléfono?
Ethan acababa de salir de una de las habitaciones, y ya no llevaba la gorra ni el delantal de la cafetería. Dio un respingo al darse cuenta de que estaba ahí.
–Ah, hola Eleanor.
–Buenas.– bostece de nuevo.
–¿Estás cansada?– me preguntó.
–Si, mucho, llevo toda la tarde soñando con sábanas y almohadas.
–¿Entonces no irás a la fiesta?– lo miré ceñuda.
–¿Qué fiesta?¿De qué hablas?
–¿Cómo que, qué fiesta?¿Lara no te contó nada? – negué y me miró sorprendido. – va a haber una fiesta de universitarios aquí cerca, escuche a Lara hablar de ello con Ian, supuse que tú también irías.
–Pues no me ha dicho nada.
–Creía que sí, quizás Lara no vaya, y son solo ideas mías.
–No lo sé, pero vaya o no, estoy muy cansada para fiestas– Ethan asintió–¿Tu iras?
–Si, supongo que sí.
–Bueno pues pásatelo bien entonces.
–¿Entonces tu no iras?– se interesó.
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KARMA //editando//
RandomMamá se encontraba en la cocina preparando mi chocolatada preferida, papá estaba junto a mi con la mirada perdida en la pantalla del televisor, amaba la ilusión y la admiración que veía en sus orbes cada que observaba o hacia algo que le gustaba. So...