Virtual Love

Capítulo 7

Transcurría la madrugada en las calles de Barcelona cuando un sonido en la habitación hizo que ambas chicas dentro del cuarto y unos tres gatitos se empezarán a medio despertar.

-_____, apaga tu alarma-

Mencionó una adormilada Mari mientras se volvía a acomodar en su cama, tapándose inclusive la cara con la sábana.

-Yo no puse una alarma... Eso es un tono de llamada-

Hablo aún dormida la otra presente en el cuarto, volviendo a acomodarse contra su cama. Eso hasta que todo dio click en su cerebro y decidió levantarse para ver el remitente de aquella llamada.

Las palabras de "Mamá" se podían leer en el nombre de contacto, algo que la hizo dudar un poco de que pasaba, así que decidió hablar.

-¿Bueno?-

Contestó aún buscando acostumbrarse a la poca luz del sitio.

-¡Hola mi bebé! ¿Ya llegaste a                 Barcelona? ¿Ya comiste?-

Preguntó del otro lado su abuelita, estando algo interesada en saber el estado de su nieta mientras que a su lado estaba la madre de la misma, sosteniendo el celular en altavoz.

-¿Abue? ¿Qué andas llamándome a...-

Verifico la hora, eran las 3 de la madrugada en ese momento por lo que pudo ver en el reloj de mesa.

-¿A las 3 de la madrugada?-

Cuestionó algo confundida por esa acción antes hecha.

-¿No hablamos antes de que me fuera de los cambios de horario?-

Era más un dudar por que tenía por seguro que mucho antes lo había hecho.

"Vez, te dije que era mala idea llamarla ahora"

Pudo escuchar a lo lejos a su mamá, a lo cual ella soltó un suspiro para que no hubiera más problemas con eso.

-Si abue, ya estoy en Barcelona, llegué con Pipe y ahorita estoy con Mari en un hotel. Por lo de la comida, fue algo ligero pero estuvo rico-

La misma sonreía por que su abuela estuviera menos preocupada por eso, era eso o que a cada segundo del día le mandara mensajes sin parar en busca de saber por ella.

-Recuerda que te debes cuidar mucho, verificar por donde andas y ten cuidado con las personas, siempre el teléfono esta prendido para que nos llames por cualquier cosa-

Aquel discurso era parecido al de antes cuando ella había llegado a vivir a la Ciudad de México, casi algo que le hizo sonreír por esa misma cuestión de siempre.

-Si abue, tendré cuidado-

-Y no dejes que los gatos hagan lo que sea-

Río en bajo, si, su abue sabía todo de ella.

-Bien... Entonces te dejo dormir. Nos mandas mensaje cuando vayas a salir y por donde andes. Te quiero mi bebe-

-Yo mas abue, nos vemos. Voy a colgar-

Y tras una afirmación solo la chica alejo el teléfono antes de colgar la llamada, viendo de nuevo el celular entre sus manos antes de dejarlo en la mesita de noche. Sin más, se volvió a acomodar en su cama, ahora invadida por las tres presencias de gatos que habían ido en busca de calor de su ama.

Sin más, la chica se cubrió con la sábana para dormir mientras la madrugada transcurría.

[En la mañana]

-¿Segura llevas todo?-

Le preguntó a su compañera que estaba terminando de doblar sus últimas prendas dentro de la maleta.