Chiara
Me levanté con una resaca maldita, aún recuerdo todo lo ocurrido en la fiesta, el buen sexo con Nick, hice las pases con Marck, después jugamos verdad o reto y me terminé besando casi a todo el grupo.
-Despierta ya es tarde para la universidad-Habló Matt mientras entraba a mi habitación y abría alas cortinas de un tirón.
-Cierra las malditas cortinas Matt-Contesté de mala gana, tapando mi cara con la sabana.
-Apura niña que vas a llegar tarde el segundo día de clase, te espero en el auto-Dicho eso salió por la puerta y se fue.
No tardé mucho es abrir lo ojos y ver que efectivamente esta resaca me estaba matando. Entré al cuarto de baño y procedí a quitarme toda la ropa, al hacerlo me di con la sorpresa de que todo mi cuello está marcado de pronunciados chupetones.
Nick te voy matar.
No voy a mentir, me gustaba que me hicieran chupetones, pero no tantos y mucho menos cuando estoy teniendo sexo en una fiesta delante de 500 estudiantes.
Me apuré en darme una ducha y vestirme, me puse unos jeans vaqueros de color celeste, un jersey negro hasta el cuello y unos lentes de sol. Cuando salí de mi habitación vi que entraban unos hombres en traje al despacho de mi papá, Hunter fue el último en entrar y dejar la puerta entre abierta, fui hasta ahí para tratar de oír algo de lo que hablaban.
-Los Moretti ya están aquí- Habló mi padre al otro lado de la puerta.
-¿Qué, pero no llegaban hasta después del 04 de Agosto?-Respondió alterado uno de los hombres, no se le veía tan viejo, yo lo pongo aproximadamente sus 30 años.
-Si Lorenzo, pero hubo un cambio de planes, mientras estén aquí, de nuestro lado, tenemos una gran posibilidad de ganar esto.
-Me parece buena idea que hallan decidido venir antes, tenemos que hablar con ellos sobre los negocios- Agregó otro señor de traje, pero este era regordete y al rededor de sus 50 años.
-Lo sé muy bien, aún tenemos que arreglar cuenta con ellos también-
¿Quiénes son los Moretti y porque mi padre necesita de su ayuda? Algo me dice que todo esto no va a terminar bien.
-Hay un problema, no solo va a venir Robert, si no también sus hijos- Dijo uno de los asistentes de mi padre.
-Eso no era parte del plan-Comentó un hombre en traje que no había pronunciado una sola palabra hasta ahora.
-Lo sabemos, pero ellos ahora formarán parte de esos negocios, así que tendrán que estar presentes-
-Ellos lo vas a llevar todo al demonio, son solo 2 pijos de 22 años que no están capacitados para esto- Gritó el de 30 años parándose rápidamente de donde estaba.
-No podemos hacer esto Leonardo, eso no era parte del traro-Apoyó el hombre que se mantenía callado.
-Estoy muy consiente de lo que era y no era parte del trato, pero Robert lo a decidió así y no podemos perder a el ni a sus negocios ahora-
-Sus hijos no saben sobre el trato y condiciones que hicimos con su padre, se darán cuenta que lo hemos estado engañando por años-Volvió a gritar el.
-Lo tengo muy en claro, pero se que podemos llegar algún acuerdo con ellos, no tienen a nadie, así que más les vale aceptar, porque si no se irán de banca rota-Finalizó mi padre empujando la silla hacía atrás y levantándose par despedirse de los presentes.
Tuve que correr directo a mi habitación para que no se dieran cuenta que los estaba espiando.
-Hija, todavía estas aquí ¿porqué no has ido a la universidad?¿te sientes mal?-Me preguntó mi padre cuando me vio salir de mi habitación 5 minutos después de que todos sus invitados se fueran.
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Oscura Pasión
JugendliteraturMarck Brown y Chiara Johnson son dos polos opuestos, ella es la típica fuckgirl y el es el típico chico tímido, o bueno, eso aparenta. Marck llegó al pueblo, con la esperanza de dejar todo su pasado atrás, sin ser el centro de atracción de todos. P...