Another Love |Shinichiro Sano|

Capítulo dos.

|Mal de amor|

Mel se miró en el espejo, observó como aquellas lágrimas que habían amenazado con comenzado caer lentamente por sus mejillas.

Sabía que Shinichiro no sentía lo mismo que ella, sabía que sus sentimientos no eran correspondidos de la misma manera, pero aún así, que le haya dicho aquello le dolía tanto.

Un dolor en el pecho, como si algo estuviera apretando fuertemente su corazón.

Su garganta dolía, le costaba respirar, y miles de sollozos se escapaban.

Estaba en el baño, encerrada y totalmente sola, no quería que alguien la viera de aquella forma, no quería que alguien la viera en aquel estado, no queria ser vista de manera vulnerable.

-¿Mel? -escuchó una voz conocido llamar desde el otro lado de puerta.

La muchacha trató de reprimir sus sollozos, limpio sus lágrimas y observó con atención la puerta.

-¿Mel? ¿Te encuentras bien?

Ella no contestó. Y simplemente siguió ahí, en el suelo, llorando en silencio.

-Voy a entrar. -anunció antes de abrir la puerta.

La pelirroja escondió su rostro, evitando la mirada de aquel muchacho que acababa de entrar al baño. Se sintió observada por un rato. Al cabo de unos segundos, Takeomi se sentó a su lado, y sin saber que hacer, comenzó a acariciar su cabeza.

Ambos habían lidiado con tantas decepciones amorosas de Shinichiro que sabían exactamente que hacer cuando esto volvía a suceder, pero... esta vez era diferente, la persona que necesitaba consuelo no era el pelinegro, era ella.

Y aquello fue extraño.

Ninguno de los dos sabía como actuar en ese momento.

Mel abrazó al muchacho con fuerza, acercándolo aún más a ella, con sentir que no estaba sola le bastaba.

Él nunca vio a la joven tan mal, nunca la había visto sufrir de aquella manera, pues la muchacha siempre se centraba en los demás y en como poder ayudarlos, que rara vez se dejaba ver como una persona sensible.

Rara vez lloraba frente a las personas. Lloraba, claramente, pero no lo hacía si lo podía evitar.

Aunque, esta era la primera vez que lloraba por amor.

La primera vez que lloraba por Shinichiro.

-Takeomi... -le llamó entre sollozos.

La muchacha se separó de él en ese segundo, trató de limpiar su rostro y lo observó.

-¿Me puedes ir a dejar? -preguntó.

Aquella noche se quedaría en la casa de los Sano, pero dado las últimas sucesos, lo último que quería en la vida era tener que pasar la noche ahí.

Su amigo a su lado asintió con la cabeza, se levantó del suelo y le tendió la mano a la muchacha para ayudarla a levantarse. Mel se acercó al lavamanos, dejó el agua correr, y mojó su rostro, para limpiar aquellas lágrimas y bajar la hinchazón que su llanto había producido.