Rencor [3]

12

La tensión se podía sentir en la habitación apenas y entrabas a está. El ambiente se volvió tenso desde el momento que Thais y Damián entraron con aquella desconocida, la cual, permanecía aún inconsciente en la cama. Todos los presentes mantenían su vista sobre su anatomía, puesto que a pesar de estar postrada en una cama y con signos de haber sufrido alguna violencia, no dejaba de ser un ser un vampiro.

Fue cuestión de minutos para que la puerta fuera abierta abruptamente; por está paso un Daniel con la respiración agitada y con cara angustiada, seguido de Renata, quien le pisaba los talones.

— Por amor al creador — se dejó caer a lado de la cama, para apto seguido, tomar la mano de aquella chica — ¿Qué carajos te paso?

Los presentes se miraron unos a otros.

— ¿La conoces? — pregunto Thais.

— Es mi hermana biológica — contesto Daniel, dejando a todo mundo asombrado.

El joven vampiro nunca había hablado a grandes rasgos sobre su familia, por lo que nadie esperaba aquella respuesta.

— ¿Hermana biológica? — no evito preguntar Thais — ¿Pero cómo...?

Pero antes de que Daniel tan siquiera dijera palabra alguna, entro Joshep, el cual, apenas y podía mantenerse de pie ante el torbellino de sensaciones que estaba sintiendo en ese momento.

Camino con cautela hasta quedar a lado de Daniel, se quedó quieto por unos instantes hasta que pronunció aquellas palabras, que dejarían a todos en la habitación sorprendidos.

— Mía.

(...)

El viento movía las hebras de cabello, haciendo que la chica las colocará detrás de sus orejas. Un gran suspiro agotador salió entre sus labios.

— Vaya... — escucho aquella voz que recibía en cualquier lugar — sí que te encuentras mal — el chico se sentó junto a ella y la miro de reojo — ¿y bien, prefieres guardarlo o sacarlo?

Thais lo miro a los ojos, sabía que podía confiar en Nadir, lo único que no sabia era como poder decirle todo lo que pasaba por su cabeza, así que soltó aquello que mas consumía su mente y corazón.

— Ya se quien es mi mate — soltó — y no es Vikram.

— Pero... — apenas logro decir Nadir — ¿Cómo sabes eso? — la miro anonado por tal confesión — si faltan como 10 meses para tu transformación — la miro boquiabierto.

— Por algo llamado "beneficios de un puro" — atrajo sus piernas hacia su pecho, abrazándolas — al ser mis padres descendientes directos de los primeros lobos, bendicen a la familia en algunos aspectos.

— Vaya... — el chico siguió mirando a Thais con aquella expresión incrédula — entonces, si tu compañero no es Vikram, ¿quién es?.

Thais miro hacia al lago, admirando aquella majestuosa vista que le había fascinado desde que tenia 5 años. Estuvo así unos segundos, hasta que sus labios pudieron pronunciar aquel nombre.

— Damián — apenas logro decir lo suficiente alto para que su amigo escuchara — el beta Damián.

— Estas de joda — la miro mas impresionado de lo que ya estaba — ¿el beta de tu padre? — coloco sus manos en sus hombros y la movió un par de veces — ¿es en serio?

— Si, bueno, al menos fue lo que me dijo el — movió sus hombros para que su amigo retirara las manos de ahí — y mis padres no lo negaron, así que se puede decir que sí.

Ambos se quedaron en silencio durante unos minutos, cada uno procesando aquella confesión de la pequeña Black, fue entonces que Nadir hablo.

— ¿Entonces que va a pasar con Vikram? — pregunto — su transformación es en dos meses... puedes ocultarle esto durante unas semanas, pero no cuando llegue su cumpleaños — hizo una pequeña mueca — y siendo honesto, no creo que lo tome bien.

— Lo se... — sonrió con amargura — créeme que lo sé — miro a Nadir con tristeza — quiero mucho a Vikram, por eso no tengo el valor de decirle que no soy su compañera.

(...)

Eran más de las dos de la mañana cuando la pequeña Thais ingresaba a su habitación, la platica con Nadir se había extendido demasiado y el paseo nocturno otro poco más.

Apenas entro a su habitación y sintió la presencia de la persona que menos quería ver en ese momento.

— No te vayas por favor — escucho decir a Damián, puesto que mano había sujetado la perilla de la puerta para salir de ahí inmediatamente — necesito decirte algunas cosas.

— Es demasiado tarde — contesto — ¿crees que pueda ser mañana?

— Esta bien — suspiro con pesar el beta — solo si me prometes que vas a escuchar cada una de las palabras que tengo que decirte.

— Lo prometo. 

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Hola!

¡¡¡Estoy de nuevo por aquí!!! Espero no se hayan olvidado de la historia. Me prometí actualizar antes de que se acabara el año, así como acabar esta historia durante el siguiente año.

🎉Feliz año nuevo 2022 🎉
Les deseo un buen inicio de año.

¡Muchas gracias por leer!

— Liz <3