chapter 3

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Al día siguiente, al llegar a la escuela, iba caminando tranquilamente hacia mi salón, escuché gritos provenientes de varias personas, en su mayoría eran voces masculinas, voltee y vi a 5 chicos molestando y golpeando a otro chico, no lo había reconocido hasta que enfoque mi mirada en el.
Janeth: Demonios, es Alfredo!!
Rápidamente solté mi mochila y salí corriendo en dirección a ellos, corriendo tome impulso y con la fuerza logré derribar a dos de ellos, tome a dos y los choque uno contra el otro, al quinto lo tome por los hombros y le pegue una patada en el estómago.
Alfredo estaba en el suelo con varios golpes en el rostro y con un poco de sangre en la nariz, rápidamente lo ayude a levantarse y ni bien se levantó me abrazo, poniendo un poco de fuerza.

Alfredo: Gracias, muchas gracias, por poco me matan
Janeth: Después me agradeces, ahora vamos rápido a la enfermería antes de que tengas una hemorragia

Lo tome por los hombros pasando mi brazo por su cuello y lo lleve a la enfermería, cuando llegamos entre, pero no estaba la enfermera, está situación no podía estar peor.
Tenía que hacer algo así que tome un poco de algodón y alcohol, con miedo se los puse levemente en los golpes abiertos que tenía, le dolió, supongo, pero era para que estuviera bien y las heridas no se infecten.

Alfredo: Oye, gracias, en serio muchas gracias, no se que hubiera pasado si no hubieras llegado
Janeth: No te preocupes, no pasa nada, ayudaría a cualquier amigo y más si los están golpeando

Alfredo solo rió, después de terminar de curar sus heridas salimos de la enfermería, caminamos hacía el salón pero el profesor no nos dejó pasar
Maestro: Llegaron muy tarde, no voy a dejar pasar a dos irresponsables...

Para el poco tiempo que llevaba en ese lugar sabía muy bien que ese profesor no entendía razones.
Salimos de la escuela y para evitar el posible regaño de nuestros padres decidimos ir a un pequeño parque cerca de la universidad, supongo que también para tranquilizarnos

Janeth: Por que te estaban golpeando esos tarados?
Alfredo: Pues, verás, estaba caminando un poco rápido para contarle una duda al profesor antes de que todos llegaran, cuando estaba caminando miraba mi libreta, no mire bien y choque con uno de esos tarados me dijeron que era un estúpido y pues lo demás ya lo sabes
Janeth: Son unos exagerados, pero te aseguro que después de la golpiza que les dí no volverán a molestarte -el sonrió-

EL SECUESTRO - KheaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora