ICEMAN; Javier Bonet

-𝟑𝟎

Javier

Es domingo, me he despertado hace un rato, y, para qué mentir, echo de menos a Alejandra y tengo ganas de verla

Alcanzo mi movil ya que lo tenía encima de la mesa y busco su numero en mis contactos

[LLAMADA]

-Buenos días rubia. Saludo cuando me lo coge

-Hola. Responde con una voz notablemente desanimada

-Ey, ¿que pasa enana?. Pregunto extrañado

-He pasado una noche de mierda, me encuentro fatal. Suspira cansada al otro lado de la pantalla

-Joder, bueno tranqui, relájate, descansa, ¿necesitas algo? ¿estás con tus padres?

-No, este finde se han ido fuera y no llegan hasta esta tarde noche. Explica

-¿Estás sola?. Vuelvo a preguntar preocupado

-Si. Contesta bajito

-¿Y por qué no me has dicho nada? Voy para allá. Aseguro

-No hace falta Javi

-Que si, que no voy a discutir. Digo seguro -En 20 minutos estoy ahí, ahora nos vemos. Me despido y cuelgo el teléfono

Aviso a mi padre de que voy a casa de Alejandra ya que mi madre y mi hermana han salido hace un rato

-Papá, voy un rato a ver a Ale, me ha dicho que estaba mala. Lo aviso suspirando

-Vale hijo, tranquilo. Sonríe -Que sepas que me alegro mucho de que estés a gusto con esa chica

-Ya. Rasco mi nuca tímido -Yo también. Admito sonriendo de medio lado

-Anda vete ya. Señala la puerta riendo sin darle más bombo a este tema ya que sabe que me da vergüenza

-Chao. Río negando con la cabeza y salgo de casa tras ponerme la riñonera

De camino a la suya paso por un supermercado y compro una caja de bombones

Pocos metros más para alante veo en un escaparate un osito de peluche muy mono y decido llevárselo también

Si me llegan a decir a mí hace dos meses que iba a estar haciendo esto por alguien me río en su cara

Pero ya no me importa nada

Poco después llego a su portal y pico a su piso para que me abra

-¿Si?. Responde al interfono

-Yo rubia, abre. Pido y veo la puerta abrirse

Subo en el ascensor hasta el segundo y al llegar la veo en la puerta esperándome

-Eres cabezón eh. Me mira algo decaída

-Estaba claro que iba a venir. Digo obvio -Mira lo que he traído. Canturreo y le enseño los bombones

-Estás fatal. Los coge y me abraza pegándose a mi pecho

-¿Como te encuentras?. Pregunto bajito

-Mal. Admite en un suspiro

-¿Has comido?. La miro cuando nos separamos unos centímetros

-Que va, no tengo nada de hambre, solo quiero dormir

-No no, algo tienes que comer por lo menos. La señalo con mi dedo índice -Vamos a tu cuarto y te estiras mientras yo preparo alguna cosa

-Que no Javi de verdad. Insiste