ETERNAL (CHARLIE WEASLEY) +18

CAPITULO XVIII.

El dolor de cabeza en ese momento era de lo peor, Amelia se encontraba dando vueltas en su cama de una forma exagerada.

-No vuelvo a tomar en mi vida.- se dijo para si misma sentándose en la cama colocando sus rodillas en su pecho.

-Por fin despiertas hermanita.- Un Alexander con una sonrisa torcida se asomo por la puerta de la habitación.

-Callate no hables.- dijo la chica tomándose la cabeza con las manos.-

-Por cierto como llegue ayer a la casa.-

-Enserio no recuerdas nada de ayer?.-

-No y por esa razón es que te estoy preguntado.- dijo enojada y sarcásticamente.

-Tú novio vino a dejarte, venias cantando como loca y gritando cosas demasiado vergonzosas como para decirlas en voz alta.- Alexander por cada palabra que decía se acercaba a la cama de su hermana.

-¿Novio?.-Pregunto incrédula.

-Si, uno pelirrojo, con apellido Weasley.-dijo sentándose junto a ella.- No me digas que tienes otro novio aparte de Charlie?.- exagero el chico abriéndolo los ojos.

-No, claro que no, pero como es que el sabia que yo estaba tomando en las tres escobas?.- susurro para ella misma aunque su hermano logro escucharla.

-El se lo explico ayer a papá, pero es mejor que te cambies, por que mamá esta mas que enojada por como llegaste ayer.-Alexander se para de la cama para despues despeinar el cabelo de Amelia, si es que eso era posible.

La chica solo vio como Alexander salía de su cuarto para despues volver acostarse, pero un fragmento de la conversación que tuvo con Hermione y Rebeca llego a su mente.

* No salgo con Charlie, solo me esta ayudando por que mi ex-prometido se la pasa molestando con que volvamos a salir y hablando mal de los Weasley.*

Amelia solo movia la cabeza negando lo que habia recordado, no era posible que su tonta y floja boca haya dicho eso con tan solo unos tragos.

-Espero y las chicas no recuerden nada o esto va a empeorar.- se dijo a si misma temerosa.

Amelia se ducho y vistió para despues bajar al comedor en donde se encontraba ya su familia.

-Por fin bajas creimos que te habias quedado dormida.-Le dijo su padre con diversión.

-Es lo menos que puede hacer despues de llegar gritando toda borracha.- Hablo su madre la cual le dio un frasco con un liquido amarillo un poco viscoso.

-Es para la resaca, tómalo, tenemos muchas cosas que hacer cariño.-dijo esta vez mas calmada su madre.

-Siento mucho lo de ayer, sali con dos amigas a beber solo una cerveza de matequilla y eso se convirtió en mas.- dijo apenada, en parte lo que habia dicho era verdad ella pensaba solo tomar una cerveza de mantequilla pero Rebeca ponía los tragos fuerte.

-Esta bien, ya paso, me calma el hecho de que el chico Charlie te trajo a casa.-

-Sip.-dijo sin saber que mas decir.

-Ayer no tuve la oportunidad de hablar con el, estaba demasiado cansado como para amenazas hacia en chico.- El padre de Amelia solo le divertia la cituacion, pues si bien ya conocía al pelirrojo desde que era un niño, le gustaba la idea de asustarlo un poco con un par de amenazas inocentes.

-Y no lo aras, dejaras al chico tranquilo.- Y asi fue como sus padres empezaron una discusión sobre el pelirrojo.

Horas mas tarde Amelia ya se encontra vistiéndose para empezar a recibir a sus invitados, se estaba colocando un vestido rojos de manga larga, pero descubierto de los hombros, el cual le quedaba ajustado a su cuerpo el cual hacia resaltar sus caderas y cintura, con un escote en "v" le dicho vestido llegaba hasta los muslos.