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La pelinegra canturreaba alegre mientras se dirigía hacía el gimnasio

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La pelinegra canturreaba alegre mientras se dirigía hacía el gimnasio. Ya llevaba puesto el chándal y se le veía bastante tranquila.

-O yo llego tarde o vosotros muy pronto- dijo abriendo la puerta y viendo que ella era la única que faltaba.

Shoyo comenzó a dar saltos de alegría en dirección a la pelinegra, lo que causó en esta una carcajada. Kageyama siguió a Hinata pero él iba andando tranquilamente con su expresión de siempre en la cara.

-Aún no os coordináis del todo, pero seguir intentando hacer ese ataque. Demostrarles de los que sois capaces -al acabar miró a ambos chicos intentando transmitirles confianza.

Ambos chicos asintieron y se dirigieron a la cancha.

-Yo jugaré con el equipo de Tsukishima- dijo el capitán del Karasuno.

-Pero Daichi tú eres nuestro capitán- refunfuñó Hinata algo indignado.

-Tranquilo Hinata, mi hermana es igual o mejor que yo- Daichi cruzó miradas con la pelinegra

-Prepárate para perder capitán- desafió la chica a su hermano.

-Bueno bueno, ¿a quién aplastamos primero al enano o a tu querida hermano? Bueno, también queremos ver las habilidades del rey - dijo un chico rubio con gafas bastante alto.

-¿Y tú eres...?- la pelinegra se encaró con el rubio.

-Tsukishima Kei - contestó altivo el chico de gafas.

-Serás el primero en caer Tsukishima- la pelinegra puso su dedo índice en el pecho del rubio y a pesar de la diferencia de altura la chica no se dejaba intimidar.

- Nunca te metas con un Sawamura - dijo Daichi en voz baja mientras esbozaba una pequeña sonrisa.

-Venga Tsuki, que vamos a empezar ya - dijo un chico pecoso con tono de preocupación.

El tres contra tres ya había comenzado. Sacaba el más mayor de los Sawamura. La pelinegra ya conocía a la perfección los movimientos de su hermano, al fin y al cabo, él le había enseñado todo lo que sabe. Por eso mismo la chica no tuvo problemas en levantar la bola. Tsukishima y Yamaguchi defendían a Hinata por lo que Kageyama le puso la bola a la pelinegra. El hermano de esta intentó bloquearle pero no llego a tiempo con lo cual la chica remató con todas sus fuerzas marcando el primer punto. La pelinegra miró fijamente a Tsukishima y puso una cara desafiante. El rubio solo chasqueó la lengua y se dio la vuelta.

El partido había llegado al final del primer set. El equipo de la pelinegra lo había ganado. Kageyama y Hinata iban mejorando sus ataques, aunque aún no conseguían hacer ese ataque rápido en el que tanto insistía la pequeña Sawamura. Ahora mismo se encontraban en el tiempo de descanso.

-Kageyama, Hinata -la pelinegra los llamó y ellos se acercaron- Tengo una idea- ellos la miraban atentamente- Tienes que ponerle la bola a Hinata justo en el punto de remate y tú Hinata salta los más alto que puedas y si tienes un muro delante usa tu velocidad y esquívalo.

The King's Queen  /Kageyama Tobio\Donde viven las historias. Descúbrelo ahora