Los hechos ocurren una semana después de lo acontecido en el capítulo 29, cuando Hünkar y Fekeli pasaron la noche juntos en el bosque.
Ya era de noche.
Hünkar estaba en su cuarto, mirando el paisaje desde el balcón.Mientras contemplaba la luna, los recuerdos de esa noche vinieron a su mente... la noche en la que ella y Fekeli durmieron juntos en la choza del bosque.
Ambos estaban acostados en el sofá, abrazados y tomados de la mano.
Hacía frío y lo único que les daba calor era el potente fuego de la chimenea.Después de unos minutos en silencio, ella levantó su cabeza y lo miró con ternura.
Hünkar_ Te amo..
Las palabras de Hünkar sorprendieron enormemente a Fekeli, quién luego de aquella confesión sonrió y sin pensarlo dos veces la besó.
Hünkar sonrió ante tal recuerdo.
Cerró los ojos y sintió como un escalofrío recorrió todo su cuerpo.De repente, el teléfono de su cuarto comenzó a sonar.
Ella entró corriendo para contestar.Hünkar_ ¿Hola?
Fekeli_ Hünkar, soy yo.
Hünkar_ (Sonríe) Ali, ¿Como estás?
Fekeli_ He estado bien, pero estaría mejor si pudiera verte esta noche.
Hünkar_ ¿Estás loco? No puedo salir, Demir está en casa y ya es muy tarde.
Fekeli_ Por favor! Hace mucho no te veo, Hünkar.
Hünkar_ Fekeli, es medianoche! ¿A donde le diré que iré?
Fekeli_ Puedes salir sin que se den cuenta.
Hünkar_ (Suspira) Esta bien, haré lo que pueda.
Fekeli_ (Sonríe) Te espero afuera.
Hünkar colgó y caminó hasta su armario para cambiarse.
Se puso un hermoso vestido negro lleno de brillos y salió sigilosamente hasta el pasillo.Todo estaba oscuro.
La mujer bajó las escaleras con sumo cuidado y logró salir de la mansión sin ser vista.Fekeli estaba esperándola en la entrada.
Al verla, una enorme sonrisa se formó en su rostro.Fekeli_ (Abre la puerta del auto) Adelante, mi hermosa dama.
Hünkar_ (Besa su mejilla y entra al auto) Gracias, caballero.
Ambos soltaron una suave carcajada y emprendieron camino.
Fekeli la llevó a la misma choza donde habían pasado la noche aquella vez.Los enamorados salieron del auto y se quedaron afuera mirando las estrellas y sintiendo la brisa nocturna alborotandoles el cabello.
Fekeli_ (La mira de frente y acaricia su mejilla) Hünkar... desde hace un tiempo he querido proponerte algo pero no me atrevía a decirtelo por miedo a como reaccionarias.
Hünkar_ Dime, Ali.
Fekeli_ (Se acerca más a ella y pone sus manos en su cintura) Tú...
¿Quisieras ser mi amante?Hünkar soltó una tierna y fina risita ante tal proposición.
Hünkar_ Esa es una propuesta muy indecente, Fekeli.
(Sonríe) Pero la acepto.La expresión de preocupación de Fekeli cambió a una expresión de completa felicidad.
Fekeli_ Te amo, Hünkar.
Hünkar_ También te amo, Ali.
Los ahora oficialmente amantes se besaron y abrazaron con fuerza.
Fekeli_ (La toma de la mano) Ven, vamos adentro.
Al entrar a la choza, Hünkar se sorprendió.
Todo estaba limpio y muy bien decorado.
Habían velas rojas y blancas en toda la habitación, y el sofá estaba cubierto por una suave sábana negra.
En la mesa habían dos tazas de té, dos copas de vino, fresas, moras, panes y quesillos.Hünkar_ (Mirando cada esquina de la habitación) Ali, esto es precioso..
Fekeli_ (Sonriendo) Sabía que te gustaría este nuevo arreglo.
Hünkar_ (Se voltea hacía él y pone sus manos en sus hombros) Gracias.
Fekeli_ (Vuelve a colocar sus manos sobre su cintura) Todo sea por ti, mi hermosa Sultana.
Nuevamente, la pareja se unió en un beso.
Pero esta vez no fue un beso suave y tierno, fue un beso algo brusco y arrebatado.Él la guió hasta el sofá y la acostó para luego subirse sobre ella y continuar besándose.
Después, bajó lentamente por su cuello hasta llegar al inicio de sus pechos.
Besó y saboreó cada rincón del cuerpo de su amada, hasta que se preparó para entrar dulcemente en ella.
Ella disfrutaba cada uno de sus movimientos y él disfrutaba de oír los suaves, dulces y refinados gemidos de su ahora amante.