Chicos de anime y tú One shots

Kenma Kozume (Haikyuu)

Palabras: 965

Pedido por: locaxqsi7v7

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Cuando te presentaste ante todos como la manager de Nekoma Taketora festejó y te presumió ante Karasuno por medio de mensajes.

Realmente eras un poco tímida y algo torpe por lo que sentías que no debías haber inscrito como manager. En realidad eras como Yachi, la segunda manager de Karasuno, incluso decían que eran hermanas perdidas.

Es decir, ¿Quién no se pondría tímida con chicos altos y aparte guapos?

Aún así, hacías todo lo posible por ayudar a todos los chicos. Sólo que había un problema.

Kozume Kenma.

El armador de segundo año te ponía tan nerviosa que incluso cuando te veía temblabas como una gelatina.
Kuroo se dió cuenta de aquel extraño comportamiento que tenías hacia su amigo, así que decidió ayudar.

- oye, Kenma, ¿Qué piensas de TN?- preguntó el capitán

- es algo despistada y se pone muy nerviosa cuando quiere decir algo- respondió sin despegar la vista de su videojuego

- ¿Sólo eso?

- ¿A qué quieres llegar?

- no lo sé, tal vez sientes algo por ella y...

- no, no me gusta, así que deja de decir eso. Hasta mañana- entró a su casa dejándo solo al pelinegro

- creo que será más difícil de lo que pensé- se dijo a sí mismo

Al día siguiente habías llegado tarde, cosa que confundió a todos, pues siempre habías sido puntual e incluso llegabas antes que los demás.

Durante todo el entrenamiento te vieron distraída a lo que empezaron a imaginarse varias cosas, tanto buenas como malas, dando muy malas caras con la última opción.

- había visto que también llegó tarde a clases- habló Taketora

- ¿Qué creen que tenga?- preguntó Yaku

- por ahora no hay que pensar eso, tal vez sólo tuvo un mal día- respondió optimista Kuroo

Más equivocado no pudo estar.

Ya había pasado una semana y otra vez habías llegado tarde, pero esta vez notaron algo. Ya no tenías una sonrisa.
Incluso bolsas negras colgaban bajo tus ojos demostrando que no habías dormido bien.

Cada que ellos querían hablar contigo desviabas el tema e intentabas sonreír, cosa que no funcionaba pues parecía más una mueca.

En el descanso saliste un rato, según tú, para tomar aire.
Kuroo miró a su lado donde estaba su amigo con una cara triste. Incluso era la primera vez que no tenía su videojuego en un descanso.

- ve- habló el más alto

- necesita su espacio

- podrá sonar mal, pero le dimos un gran espacio y sigue mal, necesita a alguien que la escuche. Estoy seguro que tal vez te necesita a ti.

Ante tal confesión, el semi rubio salió del gimnasio para ir a buscarte.
Te buscó por todas partes hasta que escuchó unos sollozos dentro de un salón.
Rápidamente fue hacia aquél lugar donde te encontró en el suelo abrazando tus piernas y con la cabeza escondida entre ellas.

- TN...

Al escuchar al armador soltaste un brinco y limpiaste tus lágrimas dándole una sonrisa, obviamente forzada.

- ¿Pasa algo?- preguntaste

- eso deberías decir yo. Has estado demasiado rara estos días- se sentó a tu lado- ¿Hay algo que quieras contar?

Al escuchar eso volviste a llorar y él, tímidamente, te abrazó por los hombros.

- mis papás se van a separar- dijiste con tu cabeza en su pecho- odio cuando se pelean cada día por cosas tontas, y tal vez esto sea bueno para ellos, pero aún así esto duele

- no soy bueno animando, pero al menos debes de saber que esto lo hacen por tu bien y por el suyo. Tal vez su relación ya no daba para más y decidieron alejarse, así que sigue con esto y...

- no lo entiendes- lo interrumpiste- voy a mudarme y dejaré todo esto. Ya no seré su manager, no voy a estar para aconsejarlos y no volveré a verte

- ¿Qué?

- yo... Yo te amo Kenma- confesaste- sólo quiero que sepas eso antes de que me vaya... Mañana le avisaré al entrenador de está situación y probablemente nunca más nos veamos

- entonces hagamos una promesa- alzaste tu cabeza para verlo- hay que prometer que aunque pasen los años nunca dejaremos de hablar. Vamos a intercambiar números para estar en contacto.

Tú sólo lograste asentir para que te diera su número como él a ti. Siguieron platicando de cualquier otro tema que no sea de eso y decidieron volver al gimnasio.

- por cierto- habló el chico a tu lado- tú igual me gustas

- bienvenidos a un nuevo video- habló el chico viendo hacia la cámara- el día de hoy les presentaré a alguien muy especial para mí, así que espero que le den una cálida bienvenida- sonrió- puedes pasar

Entraste a la gran habitación y abrazaste al chico por la espalda mostrando una gran sonrisa.
Al ver los comentarios en la pantalla de la computadora halagándote, Kenma se sintió un poco celoso... Bueno, tal vez más que poco.

Durante todo el stream hablaste con el chat mientras tu ahora novio estaba demasiado concentrado en jugar.
Cuando él terminó de jugar contestaron algunas preguntas sobre su relación hasta que el chico te habló.

- TN, sabes que me siento muy feliz a tu lado, nunca pensé que aceptarían ser mi novia apesar de todo lo que ha pasado, y aunque ahora me de mucha pena y vergüenza, quiero preguntarte algo muy importante- se arrodilló y sacó un anillo del bolso de su pantalón- ¿Quieres casarte conmigo?

El chat explotó con varios comentarios diciendo que aceptaras, cosa que no viste pero aún así le dijiste que sí.
Kenma puso aquel anillo en tu dedo y felizmente se lo mostraste a todos los que estaban en aquel directo.

Sin duda estabas feliz de estar con el hombre que amabas.