Capitulo 25.

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Feliz navidad atrasada y feliz año nuevo a todxs 🫶🏻


"Problema"

Ivy

Llegué canturreando felizmente a su casa.

Toqué que el timbre tres veces repetidamente.
Era una manía que tenía, ¿vale?

Lo estresaba mucho, y para que mentir, me encantaba estresarlo.
Era mi pasatiempo favorito.

Aunque hoy iba un poco asustada, ya que la carrera de Mónaco no fue muy bien.

Me sentí mal por no poder haber estado a su lado, aunque él decía que no importaba.

Maldita película.

–No hace falta que llames tantas veces y-

Salté como una loca encima de él.
Él reaccionó y me puso sus manos en mi cintura, acercándome a él.

–Hola aburrido.

Lo miré a esos ojos que me hipnotizaban.

–Hola amor de mi vida.

Sentí como mi cara enrojecía.

Estúpido, siempre sabía que decirme.

Cerré la puerta a mis espaldas.

–¿Estas bien?–le revolví el pelo.

Me gustaba más cuando tenía el pelo alborotado.
Estaba más mono.

–Si, son cosas que pasan. Y más en el circuito de Mónaco–me abrazó de nuevo y yo salté para colocar mis piernas alrededor de su cintura.

–Ganarás en Mónaco algún día y yo estaré para verlo–vi como sonreía– y espantaré a todas las tipejas que se te quieras acercar.

Escuché su risa, y vi como se escondía en mi cuello.

Me gustaba aún más cuando era cariñoso.

Si vuelvo a la noche en la que lo conocí, jamás me hubiese imaginado que fuese tan cariñoso en privado.

–Yo solo tengo ojos para ti.

Mentiroso

¡¿Como podía decir esas cosas y quedarse tan tranquilo?!

Salió de su escondite y me miró.

Y obviamente estaba sonrojada.

Odiaba que siempre me pasase.

Me tape la cara con las manos y sentí como caíamos los dos en el sofá.

–No te tapes–quitó mis manos– me gusta verte sonrojada.

Y eso hizo que lo estuviera aún más.

Después de tantos meses de espera, pudimos ver la maldita serie.

Me daba mucha vergüenza cada vez que salía en alguna de esas escenas.

No me gustaba verme.

Al final la serie no es que fuese para tanto.

Pero a Max pareció encantarle.

En todas las horas que estuvimos sentados, él no despegó la mirada de la pantalla a no ser que fuera para mear.

–¿Que te ha parecido? –pude preguntar después de varias horas después.

–No te voy a negar–sonrió pervertidamente–había varias escenas en las que tú culo s-

I wanna be yours Donde viven las historias. Descúbrelo ahora