Ritual de Cortejo (Sterek)

Capítulo 2

Derek no había podido encontrar pareja. 

Era deseado por muchos, se caracterizaba por ser Guapo, Fuerte, el epítome de un Alfa Perfecto, pero nadie había logrado despertar ningún deseo en él. Sin necesidades instintivas, sin deseo, sin lujuria, sin amor, absolutamente nada. 

Había agotado todas sus opciones en Beacon Hills y, bajo el consejo del líder, Scott, Derek dejó la ciudad para buscar pareja.

Viajó mucho y lejos confiando en la intuición y el instinto para guiarlo hacia una pareja. Rezó a los dioses y diosas del mar para que lo ayudaran a encontrar a la persona con la que estaba destinado a estar. 

Terminó viajando a aguas más cálidas cerca de vibrantes arrecifes de coral. Ubicó el sitio de habitación principal, pero se mantuvo fuera de la vista por ahora. Muchos cardúmenes no se llevaban bien con los extraños, especialmente con los que eran tan diferentes a los de su propia especie.

Se trasladó a las afueras del arrecife donde los corales se elevaban y decidió esperar su momento y observar las costumbres del bajío antes de hacer una presentación. Tenía un buen presentimiento sobre este lugar. 

Tenía la esperanza de encontrar pareja.

Nadó entre el bosque de coral en busca de un lugar para quedarse cuando llegó a la cima de una cresta de coral que se abría a una pequeña pradera de hierba marina; el sitio que vio lo dejó sin aliento. 

Allí, sobre la hierba, afilando un cuchillo de hueso sobre una piedra, estaba la criatura más hermosa que Derek había visto en su vida.

El tritón era fuerte y musculoso, y la mirada de Derek era cualquier cosa menos respetuosa mientras deseaba el cuerpo tonificado del tritón. 

Su cuerpo y cola, a diferencia del resto de la gente del arrecife, era más similar al patrón de su propia manada. Pálido, oscuro y hermoso a los ojos de Derek, el tritón podría camuflarse fácilmente en las costas rocosas y las aguas abiertas de su hogar. 

Se acercó, sigiloso y silencioso, tratando de acercarse lo suficiente para confirmar. 

Se mantuvo alejado de la corriente del tritón y olfateó el agua.

Omega.

Los ojos verdes de Derek brillaron cuando percibió el dulce y tentador aroma del omega.

Físicamente fuerte y bellamente camuflado, el omega sería perfecto para protegerse y proteger a sus crías mientras que el alfa se adentraba en aguas más profundas para cazar. 

Un zumbido de deseo y necesidad inundó a Derek. 

Finalmente había encontrado a su pareja.