𝑶𝒍𝒊𝒗𝒊𝒂 ➳ chanbaek

➳ Final

Baekhyun subió el escalón y se detuvo, vomitando a un costado de la barandilla. Tenía un revoltijo en el estómago y la taquicardia hacía doler su pecho. Casi jadeando y con la respiración atascada, logró entrar al apartamento todavía temblando. Se sentía como si pudiera enloquecer en cualquier momento. Cerró la puerta y se deslizó contra esta, sentándose en el suelo, llorando un montón. Ver a Chanyeol nuevamente, con una mujer de su brazo y sentir esa cantidad exagerada de emociones y sentimientos había sido demasiado. Gracias a ello, un nuevo ataque de pánico estaba atormentándolo como los tantos que había padecido anteriormente durante este último tiempo. No podía dejar de llorar, respirar era difícil, no podía dejar de sentir, no podía dejar de pensar y arrepentirse una y otra vez por haber lastimado a Chanyeol; ¿quién se suponía que era él para atreverse a hacerle algo así a la única persona que lo había comprendido y amado tanto como le había demostrado? Definitivamente, sabía que no merecía a Chanyeol, estaba completamente fuera de su camino. Merecía ser feliz y él, dejar de sufrir y lastimar a otras personas. Se sentía mareado, el temblor sacudía su cabeza y sentía mucho miedo; su ataque se estaba intensificando y creía que iba a morir, se sentía de ese modo. Estaba sentado, casi acurrucado sobre sí mismo mientras cubría sus oídos con ambas manos y apretaba sus ojos. Cualquiera que lo viera de ese modo, creería que estaba loco, demente, pero sólo se sentía muy asustado y enfermo como para actuar normal y fingir como solía hacer. Pasó unos cuantos minutos de ese modo, buscando cualquier estímulo con sus ojos que le hiciera distraerse y dejar de pensar en todo lo mal que había hecho, pensando entonces por qué él estaba en esta situación ahora mismo. Recordó a Jaehyun, los años a su lado, las experiencias que este le dejó y todo lo que tuvo que vivir, ¿por qué le había hecho vivir ese infierno? ¿Por qué fingió amor cuando en realidad tenía tanto odio? ¿Por qué él ahora estaba sufriendo de tal manera, a causa de Jaehyun? ¿Qué pecado debía pagar? ¿Por qué debía doler tanto, si sólo quería amar? ¿Por qué Jaehyun le había hecho todo aquello si decía que lo amaba?

Nadie que te ama podría dañarte tanto hasta destruirte psicológicamente, Baekhyun.

Lo entendió, lo comprendió el día que Chanyeol se lo dijo de forma tan clara, lastimosa y dulce, pero todavía no comprendía qué hacía allí, entre las redes de Jaehyun nuevamente. Sorbió su nariz y se levantó del suelo, tropezando con sus propios pies cuando se dirigió a la sala. Se encontraba solo, como siempre había sido al lado de Jaehyun, no era de otra manera. Se sentía un imbécil por haber sido utilizado de ese modo, por sentir lástima y compasión por alguien que no sentía ni una pizca de eso por él.

Su celular estaba sobre la mesa y con su mano temblando lo tomó, tecleando el mensaje de texto mientras saboreaba las lágrimas saladas que ingresaban por medio de sus labios apretados. Escribió lo que tenía en mente, lo único que podía pensar ahora mismo. Una vez que creyó que era suficiente, dejó el móvil donde estaba y limpió sus ojos, asomándose a la ventana. Lo único que podía ver desde la altura era el estacionamiento del edificio; el cielo celeste tenía algunas nubes que se estaban haciendo grises y la brisa fría lo embriagó mientras las lágrimas seguían aproximándose por sus ojos. Sólo quería huir, quería terminar con todo, quería dejar de dañar a la gente, quería dejar de sentirse tan miserable y lastimoso, quería dejar de lamentarse por quien era, estaba cansado.

-¿Por qué... no había pensado en esto antes? -se preguntó, sentándose en la ventana con las piernas hacia afuera. Sus manos temblaban sujetando los costados de la ventana, pero lo que estaba haciendo no se sentía tan mal después de todo.

[...]

El bullicio del restaurante no era molesto en lo absoluto, se oía la gente parlotear en las demás mesas y la suya no era la excepción. Jongdae hablaba sobre algo de lo que los demás reían, pero Chanyeol no estaba haciéndolo en absoluto. Su mente seguía reproduciendo el momento en que sus ojos se cruzaron con los de Baekhyun, ¿estaba él bien? ¿Cómo había tomado lo que hablaron aquella última vez en el teléfono? Esperaba no haber sido demasiado duro, pero sintió que era necesario. Ya no debía pensar en ello, iba a superarlo e iba a seguir adelante, siempre lo había hecho. No podía morir por un corazón roto, no podía darse el lujo de sentirse así.