離さないでください | stary

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Viernes, 21:29 PM

Stan abrió sus ojos, sintiendo un peso ligero por encima

Lo había despertado un ruido estruendoso en la habitación.

—Ya despertaste— Dijo Kenny, agachandose a recoger un desodorante que se le había caído —Puedes seguir durmiendo si quieres, de todos modos mis padres nunca aparecen por aquí.— Se colocó una remera negra.

Stan no contestó, sólo acarició el cabello de Kyle con gentileza, el cuál estaba durmiendo en su pecho pacíficamente

—Él duerme mucho luego de hacerlo, pero si lo despiertas no se molestará— Kenny tomó sus llaves —Y, oye—

Se acercó a la cama, plantandole un beso en la frente a Kyle

—No hagan nada mientras yo no estoy, o me pondré celoso— Le sonrió

Caminó hacía la puerta y la cerró, dejándolos solos.

Luego de unos minutos de acariciar su cabello, Kyle despertó

Sus ojos aún no estaban del todo abiertos

—Lo siento ¿Te desperté?— Apartó su mano de su cabello

Kyle sonrió y negó con la cabeza, abrazando su pecho y recostandose aún más en él -Buenos días- Dijo, acercando su rostro y dándole un beso a Stan, el cuál correspondió

Se separaron unos centímetros

—¿Dormiste bien?— Preguntó el pelirrojo

—Si supongo, ¿A ti te duele algo?—

Kyle negó nuevamente y lo beso.

Lo miró a los ojos unos segundos, para luego hablar

—Stan...— Dijo, haciendo contacto visual

—¿Si?—

—¿Puedo preguntarte algo? Cuando... Cuando lo hicimos... ¿Pensabas en mi todo el tiempo?—

—... ¿En quién más pensaría?— Le dijo sonriendo, nervioso por la extraña pregunta

Kyle sonrió, y volvieron a besarse, con un beso más húmedo esta vez

La situación se puso más caliente, cuándo Kyle sintió algo endurecerse debajo de una de sus piernas.

—¿Y eso?— Dijo riendo

—No es mi culpa...— Stan frunció el ceño, apretando las sábanas con sus manos

Kyle soltó una risa, arrastrándose por debajo de las sábanas hasta llegar al miembro de Stan, comenzando a darle pequeños besos y lamidas

Un poco después, no dudo en introducirlo en su boca.

A Stan se le escapó un gruñido, tomando la cabeza de Kyle, empujándola de atrás para adelante, a lo más profundo que podía llegar su garganta.

De repente su celular comenzó a sonar

Lo tomó y leyó el nombre

Mamá

hizo una señal a Kyle de que parará, sentándose en la cama

Kyle frunció el ceño, algo enojado por la interrupción

Se sentó a su lado

Stan pasó su mano por su cabello y contestó

—Hola— Dijo inmediatamente