Yeong quedó inmóvil y sus ojos se abrieron en miedo, su mandíbula temblaba por decir algo, pero simplemente le era imposible. Fue entonces que un ruido seco se escuchó en el cuarto del castaño, eso sacó al más alto de su trance.
— ¿Quién está allí dentro Jimin?
Jimin pudo sentir el miedo subir por su espina dorsal. Corrió rápidamente a su cuarto y cerró la puerta. Que su ex viese al gato significaba que lo chantajearía acusándolo con la dueña del edificio y Jimin no podía dejar el lugar porque ya se acercaban los exámenes finales y quería concentrarse en ello en vez de buscar un lugar donde vivir. Sabía lo mierda que podía ser Yeong, por eso estaba estático delante de la puerta de su cuarto para evitar que el otro pasase.
— ¿Acaso estás escondiendo a alguien? Ves Jimin que no somos tan diferentes. —Dijo el mayor con la ira contenida.
— Tú y yo ya no somos más que conocidos, así que no te debo explicaciones Yeong.
— Eso no lo decides tú, mi vida— dijo mientras dirigía su mano al hombro del castaño para hacerlo a un lado.
— Lárgate o tu padre se enterará que te gusta cogerte a hombres.
Jimin podría verse inofensivo y pacífico por su apariencia, sin embargo, convivir con alguien tan inestable y manipulador como Yeong le habían orillado a hacerse en parte fuerte. Tenía mucho miedo a estar solo, pero ya no era más el adolescente que se dejaba manipular y asentía a todo lo que le decían; comprendió que era más allá de una pareja y eso en parte era gracias a su mejor amigo.
Ambos estaban mirándose intensamente, ambos amenazantes, hasta que alguien tocó la puerta.
— Jiminie abre que me voy a mear encima.
Jimin no pudo evitar reír bajo y relajar su cuerpo cuando escuchó esa voz, pero no Yeong.
— ¿Por qué viene tan tarde a verte? ¿Qué a caso ahora te vas a coger al que está en tu cuarto y a tu amiguito al mismo tiempo Jiminie? —dijo la última palabra en tono de burla.
— Come mierda Yeong y de paso lárgate de mi departamento. — dijo Jimin firme para caminar a la puerta principal para recibir a su amigo.
— Aún no hemos terminado— dijo cerca de su oído para salir del lugar empujando a Taehyung.
Ni bien Yeong salió de la vista de Jimin, este último se abalanzó a los brazos de Taehyung a llorar por todo el revoltijo de sentimientos que estaba suprimiendo, frente a él ya no tenía por qué verse fuerte. La noche que estaba planeada para avanzar el proyecto final de Mundo Contemporáneo se convirtió en una donde Jimin le contaba todo lo que había pasado con su ex pareja mientras Taehyung lo consolaba diciéndole que Yeong era un imbécil y que todo iba a estar bien. Kim sabía de la relación tormentosa de su amigo, por lo que no le extrañó la infidelidad, de hecho, tenía sospechas desde la vez que le pareció ver a alguien parecido a Yeong entrar a un hotel con otro tipo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
