Tu prometido - Kagehina {Traducción}

Capítulo 20

Kageyama pov

Habían pasado algunas horas desde que Hinata y yo habíamos estado caminando sin rumbo fijo.

Después de todo ese alboroto, el pelirrojo nos sacó de la iglesia y estamos caminando tan lejos.

Confieso que me sorprendí cuando Hitoka se manifestó así, ¿cómo podía imaginar que ella sabía que Hinata y yo estábamos juntos?

También confieso que exageré un poco cuando dije todo eso, pero seamos realistas, esa boda fue una mierda.

Mientras caminábamos, algunas personas nos miraban extrañados, ya que ni siquiera había soltado mi mano

Cuando finalmente nos detuve y dije:

-Hinata, ¿adónde vamos? Has estado deambulando sin rumbo durante más de una hora, pronto oscurecerá

El pelirrojo no dijo nada, solo apretó mi mano con más fuerza.

Iba a hablar de nuevo pero se arrojó a mis brazos, agarrando el traje que llevaba puesto.

Escuché algunos sollozos bajos, cuando me di cuenta de que ya estaba rompiendo a llorar allí mismo.

Rodeé suavemente su cintura con mis brazos y pasé una mano por su cabello, acariciándolo.

El pelirrojo se acurrucó en mi pecho y respiró hondo mientras caían más lágrimas.

Pasamos media hora allí, en la calle, no en el medio, pero todos los que pasaban nos miraban.

Después de un rato, el pelirroja suspiró y se alejó

Puso una sonrisa falsa en su rostro y dijo:

- Estoy bien... todo está bien ahora

- No puedo creerlo, estabas llorando mucho hace un momento y...

-Kageyama yo solo...

- Vamos a un hotel, has tenido un día complejo y necesitas descansar un poco, y no aceptaré un no por respuesta

Vale... ya que insistes, ¿quién soy yo para no estar de acuerdo?

Nos dirigimos al hotel más cercano, que por suerte no estaba muy lejos de donde nos alojábamos.

En la recepción, cuando iba a elegir las habitaciones, algo me sorprendió un poco:...

- ¿Cuántas habitaciones desea?- preguntó la recepcionista mientras revisaba las habitaciones disponibles.

- Nos gustarían dos

- Una, por favor…- dijo Hinata interrumpiéndome.

- Bien, ¿cuántas camas señor? - dijo de nuevo la chica

- Una también...- dijo el pelirrojo un poco más bajo ahora

- Bien, aquí está la llave, que tengas una excelente estadía.

La pelirroja le sonrió mínimamente a la recepcionista, tomó la llave y se dirigió a la habitación.

- ¿Cuál es el número de la habitación? - le pregunté a la chica, ya que Hinata se adelantó sin decir nada más.

- 115 señor

- Gracias, puedo pagar mañana o tu quieres..

- Si es en efectivo, puede ser ahora, pero la máquina se estropeó entonces... uno de los empleados irá mañana a las habitaciones, a recoger la estancia.

- Ok, gracias de nuevo, mañana pago con la tarjeta entonces

La chica me sonrió y traté de devolvérselo, luego de eso me fui a mi habitación, la cual también pertenecía a Hinata.