Tu prometido - Kagehina {Traducción}

Capítulo 26

Yachi pov

Después de salir de la habitación del hospital, finalmente pude soltar lo que sentía

Asco... Y muchas lágrimas...

Estoy seguro de que la decisión que tomé es la mejor para mí y para Shoyou.

Tomé mi celular, marqué el número del pelirrojo, esperando que contestara números desconocidos, ya que recientemente cambié el mío.

- ¿Hola? - dice Hinata al otro lado de la línea.

- Hola, soy yo Hitoka Yachi – respondí rápidamente identificándome

- ¿Hitoka-chan? ¿Cambió de número?

- Sí, pero eso no es lo que vine a hablar... Me gustaría que tú y Tobio-san me encontraran en la dirección que te enviaré por mensaje.

- ¿Ahora? - el pelirrojo sonaba un poco confundido

- Sí, por favor...

-Nos vemos, hasta luego

- Hasta...

Colgó la llamada, luego les envié el mensaje de ubicación, sabía que los dos estaban juntos y de todos modos, también necesitaba aclarar algunas cosas con Kage-kun;

Agarré mi bolso y subí al auto, luego salí.

Shoyou pov

- Nos vemos, hasta luego

- Hasta - dice ella.

Terminé la llamada, mirando a Kageyama.

- ¿Qué quiere Yachi conmigo? - Le pregunté al moreno, aunque él tampoco sabía la respuesta.

- Contigo hasta nos podemos imaginar, pero ahora, ¿qué quiere ella de mí? ¿Se vengará por haberle robado a su "prometido"? - hizo comillas con los dedos

- Nah, no creo que ella hiciera tal cosa... ¿o sí?

Escuchamos el pitido de mi celular y un mensaje de Yachi, enviándonos la ubicación del lugar.

- Vamos Kageyama, no debe ser nada

- Muy bien vamos...

Tomé la llave del auto, la billetera y el celular, mientras el pelinegro hacía lo mismo, sin la parte de la llave del auto, iríamos los dos en mi propio auto.

Kageyama encendió el GPS, calculó la ruta más cercana y yo simplemente seguí la corriente, sin siquiera prestar mucha atención al camino.

~~~

Llegamos a una plaza y... espera, conozco este lugar

En esta plaza fue donde Yachi y yo tuvimos nuestro primer encuentro oficial, les confieso que ese día estuve nervioso no quise hacer nada malo ¿no?

Estaba sentada en un banco, con una bolsita de algodón de azúcar en la mano, de esos de colores que compran los niños en la calle, ¿sabes?

Kageyama y yo nos acercamos a ella, toqué sutilmente su hombro, haciendo que se girara y me mirara por un rato, antes de invitarnos a sentarnos a su lado.

Me senté al lado de Yachi mientras Kageyama estaba de pie apoyado en el banco a mi lado.

- Confieso que me sorprendió cuando me llamó, pensé que aún me guardabas rencor a - dijo siendo directo.

- No es que no guarde nada - Yachi sonrió.

Kageyama solo miró, sin decir nada.

- Bueno, pero ¿qué quieres? - Traté de no sonar como un imbécil.

- Tu padre me llamó... para hablar