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Y no es gracioso
¿Cómo corriste hacia ella
En el segundo que terminamos?

Narrador pov.

A la mañana siguiente nada era igual para Bella Swan, todo había terminado entre ellos ya no estaría con ella en las noches, ya no lo llevaría en su Volvo al instituto.

Con un suspiro se vio en él espejo, hoy tenía que ir al instituto y significaría ver a Edward.

¿Como estaría?

Fue una de la preguntas que pasó por la mente de la castaña se preguntaba si él también estaría mal porque terminaron con un poco de esperanza decidió ir.

Sus ojos se centraron en aquel espejo y la imagen no le gustó nada verse con los ojos hinchados y rojos de tanto llorar. Sin embargo con poco ánimo se alistó para ir al instituto, agradecía que Charlie ya se hubiera ido no quería tener una discusión con él por Edward.

Manejar hasta él instituto fue todo un reto para Bella, todavía no se sentía lista para verlo y mientras conducía ella se ahogaba en recuerdos que tal vez ya no volverían.

Bella suspiró y bajo del auto sintiendose observada por todos los alumnos ¿Por qué me miran tanto?. La castaña sintió un pequeño alivio al encontrarse con Ángela, ella le dirigió una pequeña sonrisa.

-No entiendo porque me miran tanto me recuerda casi a la vez en que vine por primera vez.-pensó en voz alta la castaña.

Ángela estaba insegura si decirle o no, pero finalmente decidió que lo mejor era que lo supiera.

-Bella, todos saben que Edward y tu terminaron.-las palabras de Ángela dejaron atónita a Bella

-¿Como lo supieron?.-pregunto Bella tratando de sonar bien.

-Edward platicaba con Madison y Lauren le pregunto por ti pero él dijo que ya habían terminado, solo fue cuestión de minutos para que todo se enteraran.-explico Ángela viendo con preocupación a su amiga, ella misma había sido testigo de lo mal que quedo Bella cuando Edward se fue.

-Debí suponerlo.-dijo la castaña algo enojada ahora toda la escuela lo sabía, sin embargo el destino parecía estar en contra de Bella porque ahí estaba Edward, lo peor: no estaba solo.

Ahí estaba hablando y riendo con Madison, él no se veía nada mal por haber terminado la relación al contrario se notaba feliz.

Se sentía demasiado nerviosa y rota por dentro no quería seguir mirando pero sentía que necesitaba seguir viendo, tal vez era algo tonto por parte suya seguir aferrada a una persona que le había dejado en claro que no quería nada con ella.

Bella necesitaba entender que todo había terminado entre Edward y ella.

¿Como entender que todo acabó cuando ella nunca quiso terminar?

Ellos se veían como una pareja perdidos en sus miradas y Edward de los más sonriente.

Toda esa visión fue opacada por la vampira pelinegra no podía seguir permitiendo que ella siguiera torturándose de esa manera.

-Hola chicas, solo vine para acompañar a Bella hasta sus clases.-la voz de Alice trajo de vuelta a Bella a la realidad.

-Nos vemos después Ángela.-se despidió la castaña aun con la mirada perdida.

-Se que podrás superarlo, conocerás a alguien más y seguirás con tu vida.-Bella suspiró, decirlo era tan fácil pero hacerlo...

-¿Como lo puedo superar?, para él fue tan fácil terminar todo.-Bella entró a su clase ignorando la mirada de tristeza de Alice.

-¿Bella?.-la llamó Jessica.-Debes estar mal por lo de Edward, debió ser difícil enterarte que te era infiel con Madison.-Bella la miro sin comprender.

-¿A que te refieres?.-pregunto.

-No me digas que no lo sabes, ayer yo vi a Edward en la casa de Madison.-Para nadie era un secreto que Jessica no le caía bien la nueva chica y menos siendo su vecina.

Bella se quedó un momento analizando sus palabras, apenas ayer habían terminado después de salir de la escuela, se negaba a creer que él hubiera ido a la casa de ella.

-Imposible Jessica, de seguro te confundiste.-repuso la castaña.

-Bella no seas tonta, no es la primera vez que ha ido a su casa, hasta tu misma los has visto hoy, él fue en la tarde con ella.-sin mas Jessica salió del salón dejando a Bella sumergida en sus pensamientos.

Él siempre decía que Madison no tenía nada que ver con su cambio pero sus actos mostraban lo contrario.

Bella trato de tranquilizarse sentía que en cualquier momento terminaría llorando pero entre mas caminaba se sentía peor, sobre todo con las miradas y murmuraciones sobre ella.

-¿Te sientes bien?.-pregunto Ángela acercándose a ella.

¿Como pudo olvidar todo lo que pasaron? Y sobre todo estar a lado de aquella chica tan feliz.

Edward paso a su lado como si ella no existiera como si nunca hubieran tenido una relación, lo único que quería Bella en esos momentos era irse del instituto, correr a su habitación y encerrarse en su dolor.

-Necesito salir de aquí por un momento.-dijo la castaña tratando de contener las lágrimas.

-te acompaño.-ambas salieron en él estacionamiento por un momento, Bella agradeció no encontrarse con nadie más, suficiente tenía con todo lo que decían sobre todo lo que más le afectaba eran las palabras de Jessica.

¿Infiel? No lo creía, Edward era de otra época, se negaba a creerlo, pero lo que aun le dolía era actuar como unos desconocidos.

-Si quieres te acompaño hasta tu casa.-sugirió Ángela imaginándose lo difícil que debe ser una ruptura si al menos uno no quería terminar la relación. Bella negó con la cabeza sabía que seria una estúpida por hacer esto pero ella quería ver si en realidad Edward no lo extrañaba ni un poco.

Pero sobre todo quería comprobar lo que todos decían, lo irónico era que ellos apenas habían terminado y él corrió hacia Madison, cuando él siempre negó algo relacionado con aquella chica, mientras que ella se quedo con él corazón roto él parecía contento.

-Estaré bien.-dolería verlo en la cafetería pero intentaría ser fuerte.

-dolería verlo en la cafetería pero intentaría ser fuerte

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𝐓𝐫𝐚𝐢𝐭𝐨𝐫 (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora