Me sostuve con fuerza del cabecero de la cama ante las fuertes embestidas de Joshua que no tenía intenciones de parar. Creo que a él le divertía verme sufrir por el orgasmo que aún no llegaba, pero nada más poner su miembro dentro ya sentía que me venía.
Joshua siguió poniéndose rudo y con cada embestida me sacaba varios gemidos que lo volvían loco. Me aferré a la sábana por último para recibir el orgasmo que sabía que estaba cerca, muy cerca y Joshua estaba deseoso por ver la palabra orgasmo al lado de mi nombre.
Él no tuvo piedad cuando más gemía. Y cuando pensaba que llegaba al ansiado orgasmo, la excitación se me iba de repente. Joshua hacía todo lo posible para recuperar mi excitación, pero no podía, estaba muy cansado. Su miembro perdía fuerza.
De repente, tocaron mi puerta y dimos por terminado el acto sexual desenfrenado.
Me puse el polo con rapidez y como Joshua estaba desnudo se escondió debajo de la cama. Me faltó el short y no tuve más que cubrirme con la sábana.
—¿Qué mirabas, Eiza? —preguntó mi mamá.
—Nada, mamá.
—Seguro que porno...
—Bueno, sí, pero...
—¿Ya hiciste la tarea?
—Estoy en eso...
Mamá se fue y Joshua me llevó a la cama y comenzaron nuevamente las embestidas más rudas y más fuertes. La cama comenzó a rechinar y yo a gemir como alguien que va a perder el control de su cuerpo.
Alborotada por el placer recordé que la puerta estaba semiabierta.
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Mi Novio Pervertido ©️
Ficção Adolescente¿Qué harías si te enteras que el chico guapo que te gusta es un pervertido que le encanta ver bragas? Eiza Céspedes, la chica torpe en el amor que jamás se enamoraría de un pervertido, se terminó enamorando de Joshua Berthelot. ¿Ahora qué podría afe...