Capítulo 11. Ya no es un secreto

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一 ¡¡¡¡SHINEEEEE!!!! 一Bakugo salió de la nada y explotó con sus explosiones a una sombra que había detrás de la chica.

Los dos quedaron en shock. Además, ese demonio era de clase omega.

一 Bakugo!

一 ¡Tú...!

La sombra desapareció echando un grito.

一 Bakugo...

Nadie sabía qué decir, nadie excepto el cenizo.

一 ¡Oi! ¡Tú, maldita mitad gata! ¿Te atreves a desafiarme?

一 ...

一 Ja, de nada por cierto.

No pudo decirle nada: aunque los odiase, ese demonio le había salvado la vida.

一 Y por cierto, que te quede claro, yo... 一se paró en seco一.

一 ¿Bakugo?

一 ... 一una sombra enorme de clase omega lo había poseído.

一 Tsk, por eso no debía haber confiado en ti. ¡Shoto retrocede!

一 Je, ¿qué te pasa maldita sombra?

一 ¿Eh? 一los dos se sorprendieron de tus palabras.

一 ¡No-... no pue-de s-er... T-tú... e-r-es... un- d-emon-io...! 一dijo la sombra con terror en su voz retrocediendo.

一 Oi maldita sombra, la próxima vez que quieras poseer a alguien piénsatelo dos veces antes de ser a mí.

Un humo morado salió de la nada, rodeándole, y su apariencia cambió a una más intimidante: cuernos negros saliendo de su cabeza, ropa oscura y siniestra, desabrochada por arriba dejando ver parte de su pecho, y colgante negro con una cadena colgando e él, una cola larga y acabada en punta, un tridente negro agarrado por sus manos, que en cualquier momento desgarrará a alguien; alas negras y rojas por dentro bien extendidas para intimidar

Ese era un auténtico rey demonio.

Shoto estaba impresionado y un poco intimidado

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Shoto estaba impresionado y un poco intimidado. "Bakugo..."

La sombra, llena de terror, atacó sin pensarlo dos veces.

一 ¡¡¡¡¡Wuaaaaaaaa!!!!

一 Te lo dije.

Con un movimiento de mano, la sombra se detuvo, y empezó a gritar de dolor.

一 ¡¡¡¡AAAAAAAAAAA!!! 一el grito era verdaderamente desgarrador. Los dos observaban con horror a la sombra: estaba siendo torturada por Bakugo, pero él ni siquiera le tocaba一 ¡HAAAAAAAH, AAAAAAAH! ¡¡¡¡¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!
一 ¡Bakugo ya para! 一le gritó Todoroki incapaz de seguir viendo.

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