Miedos

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¿Cómo puedo ser tan ridícula? ¿Desde cuándo me he vuelto tan miedica? Suspiro antes de ponerme de camino al instituto. Tardo poco en llegar, encontrarme entre toda esta multitud me relaja, bueno vale, si. También me relaja el hecho de que me haya alejado del bosque. No pasan ni dos segundos en los que pueda respirar tranquilamente antes de que una muchacha de pelo cobrizo y una gran sonrisa se acerque a mí como un maremoto.


-¡Nicole! - salta sobre mí Carol, casi derribándome, como un quarterback, suerte que consigo mantener el equilibrio- Han puesto las listas de las parejas para la organización del festival y me ha tocado con David... ¡con DAVID! ¿Te lo puedes creer? Con él. Díos mío, pellízcame Nicole, pellízcame.


Pongo los ojos en blanco mientras le doi un pequño golpe en el hombro, lleva tras ese chico varios años y me parece demasiado que no se haya desmayado en cuanto lo ha visto. Todos los años nos han colocado por parejas del mismo sexo para el festival, asi que deben de haberlo cambiado...un momento. ¿Lo han cambiado?


- Entonces, ¿nos han puesto con un chico este año?- murmuro

-Si eso, parece.

- ¿Has mirado con quien me ha tocado a mi?


Ella me mira, con una sonrisa en la que queda claro que se había olvidado de mí cuando miró las listas. Pongo los ojos en blanco.


-Iré ha mirarlo.


Me acerco al corcho, donde colocan todos los avisos. Hay demasiada gente pero consigo abrirme paso a codazos. Encuentro rapidamente el papel donde estan las parejas, busco mi apellido, Swether, Swether...¡Aquí está! Y mi pareja es...Damons, Eric Damons...Oh no, Oh no,no,no,no,no. De eso ni hablar ¿Eric? Por favor, debo de estar soñando...No puede ser el. El chico más malhumorado y borde de la historia, con altos niveles de violencia. Hace tres días se peleó con el chico de otra clase simplemente por que lo empujó al pasar por los pasillos, y el muchacho aún no ha salido del hospital, mientras que Eric apenas tuvo unos arañazos en los nudillos. En definitiva, que es alguien con el que no te gustaría meterte.


Suspiro, tratando de calmarme ¿Qué tenemos que hacer? Sonido. Bastante fácil, solamente tenemos que elegir varias canciones y encargarnos de que suene en el festival todo correctamente.


Justo en ese momento se escucha el timbre, sacándome de mis pensamientos. Tú puedes Nicole, tranquilízate. Lo peor de todo el que tendré que decirselo, seguramente ni siquiera se habrá molestado en mirar la lista.


Entro a clase, la profe aún no ha llegado, bien...supongo. Él está en el fondo de la clase, como siempre, lleva unos pantalones vaqueros bastante desgastados, con unas deportivas, una camiseta blanca que se le ajusta al cuerpo, y cómo no, su chaqueta negra de cuero. Está distraido con los ojos cerrados y los cascos puestos, oportunidad perfecta para mirarlo. No puedo evitarlo, a pesar de ser peligroso, es imposible negar que es guapo, bueno...está cañon, para ser exactos. Su piel morena contrasta con la camiseta, haciendo que parezca que brille, su mándibula fuerte y cuadrada, esos labios que serían la envidia de cualquier escultura, ese pelo negro azabache y sus ojos...esos ojos que se han abierto para mirar el movil...DIOS, esos ojos...negros como su pelo, eso ojos que parecen un pozo sin fondo, aunque también dan miedo, esos ojos...que me miran directamente. Mierda, mierda, tiene una ceja levantada, dejando claro su pensamiento "te he pillado". Intento conservar la poca dignidad que me queda y me acerco a él, temblando como una gelatina.


- Ho..Hola- susurro

-¿Qué quieres?- dijo el, con voz potente.

-Bueno...quería avisarte de que nos ha tocado juntos en eso de las parejas para el festival y quería saber que si...vas a trabajar, quiero decir que si tienes pensado hacer algo, como el año pasado dejaste a Eduardo solo en luces, o si quieres trabajar pero prefieres que cada uno busque canciones por su cuenta o quieres que lo hagamos juntos- murmuro, soltando todo de golpe, dejándome casi sin aire.


Eric me mira de arriba a bajo y sonríe divertido, poniéndome aún más nerviosa.


-Creo que prefiero hacerlo contigo, muñeca, pero no te hagas ilusiones.


Abro los ojos, sorprendida ¿Ha dicho en serio eso? ¿Pero que narices?


-No me las haré tranquilo.-murmuro, con una sonrisa falsa- pero cuando quiera perder el tiempo te llamaré.


Vale, si, soy una suicida, una masoquista.Estoy loca. Pero mi malhumor sale sin avisar en los peores momentos. Él me mira, borrando su sonrisa divertida, haciendo que me tiemblen aún más las piernas. Yo simplemente me doy la vuelta y camino hacia mi mesa, cuando me siento aún me está mirando, y su expresión no presagia nada bueno. Trago saliva sin poder apartar mi mirada.


Esto no es bueno.





¡Hola! Espero que os esté gustando la historia.

Soy nueva en esto así que espero que me perdoneis si tengo alguna falta o algún fallo.

Me encantaría que me votaseis y me dejaseis comentarios, y si hay algo que no os gusta demasiado, mandadme un mensaje e intentaré siempre que pueda meter vuestras opiniones en la historia.

Un enorme beso!!! ;D






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