Mentiras Verdaderas

CAPÍTULO 17

Harry observaba el atardecer desde la ventana de su habitación, Las sombras se habían alargado y el sol se inclinaba tras los altos robles del bosque prohibido, El viento suspiraba entre los árboles, haciéndoles emitir susurros misteriosos que se perdían en las sombras, Harry inhaló hondo y quedó por un segundo con la mirada perdida en el horizonte, sus ojos verdes se veían más claros volviéndose esmeraldas con el reflejo del atardecer que le llegaba desde afuera con unos sutiles rayos de sol, luego de un momento así, fue caminando a paso lento con los pies casi arrastrados hacia su cama, Se tendió y se relajó sobre ella, apenas iban ser las seis de la tarde y él ya se preparaba para dormir, bueno..
O eso fue lo que le dijo a los demás, después de ir a la enfermería por un repentino ataque de hipo, que la señora Pomfrey insistió en arreglarlo con un simple movimiento de varita, Harry se negó, se negó rotundamente a ser curado inmediatamente y le expuso a la señora Pomfrey entre continuos y molestos hipidos que él tenía el síndrome del hipo mágico, la enfermera abrió los ojos con sobresalto y fue a preparar la poción más fuerte que sabía para el mal de hipo mágico,

Harry no quería volver a clases, no después de la arrebatadora revelación, la arrebatadora revelación que de pronto le cayó como un balde de agua helada , esa revelación que lo tomó desprevenido, tan desprevenido que en ése momento no lograría sostenerle la mirada a ella, no lo podía enfrentar en ese momento, esa verdad revelada lo tomó de sopetón, Harry resoplo y se removió en su cama haciendo mover sus frágiles sábanas que tenía a un lado,

" Cómo pasó?? " pensó el pelinegro y se llevó una mano a la cabeza, "Cómo?? Dónde?? Cuando??" Harry se revolvió el alborotado cabello negro azabache como queriendo obligar a sacar esas respuestas de su cabeza, pero sin ningún éxito, él se mordió el labio inferior con preocupación, "como se supone que ahora deba actuar al verla a mi lado" se dijo en sus adentros, " Cómo!!???" volvió a pensar.
- Cómo!!??, Si me gusta!! - musito el pelinegro llevándose una almohada al rostro y ahogando una especie de gemido nervioso.

Harry había descubierto con total desconcierto que estaba enamorado, estaba enamorado de su mejor amiga, estaba enamorado de Hermione Granger!!! , y simplemente no lo podía creer, después de unos segundos ahogando toda clase de gemidos y palabrotas, dedicadas a él mismo, por no darse cuenta de sus sentimientos, él de pronto separó con vehemencia la almohada de su cara y miró al frente como teniendo un plan, Harry fue recuperando de a poco el aliento con grandes bocanadas de aire y con el rostro rojo por la presión que ejercía la almohada.

- Ya sé!!!, - dijo Harry incorporándose por la mitad y con los ojos abiertos como si se le hubiera ocurrido una idea magnífica - solo actuare con normalidad, como si nada, claro!!!, nadie más sabe que Hermione me gusta - dijo él con la mirada aún al frente, pero algo en lo más profundo de su ser no estaba de acuerdo con esa idea , su corazón.

Harry dejó escapar un pequeño
resoplido en señal de desacuerdo, pensó que tampoco era todo su culpa de no darse cuenta de sus sentimientos , éste era el primer año sin que le ocurriera nada raro ni tenebroso , desde que entró a Hogwarts, le había ocurrido de todo, en primero fue el misterio de la piedra filosofal, en segundo la cámara de los secretos, tercero fue ajetreado al principio por creer que un loco asesino lo perseguía, pero al final fue un alivio saber que Sirius no lo perseguía, sino que lo quería proteger y fue una tremenda felicidad saber que era su padrino, en cuarto el torneo de los tres magos, que por Harry, se había convertido en el torneo de los cuatros magos, sin mencionar el regreso de Voldemort, y en quinto el ataque de los mortifagos en el Ministerio de Magia, y lo peor, la muerte de Sirius en manos de Bellatrix, Harry apretó los dientes con rabia por el repentino sobresalto de ira,

Harry se dejó caer de nuevo, el pelo azabache se desparramo sobre su almohada en desprolijo mechones, y éste año que se supone que era tranquilo, ahora se sale de control por sus sentimientos, Harry se llevó ambas manos a la cara y se escuchó un hondo suspiro ahogado.