CAPÍTULO 24

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Era sábado por la mañana, el cielo empezaba a aclararse en el este, y en los terrenos de Hogwarts que se extendían a lo largo del horizonte el sol vacilante dibujaba figuras alargadas , a lo lejos se divisaban pequeñas gotas de rocío que destellaban como miles de diamantes esparcido por el césped, brillaban con cada pequeño rayo de sol que se filtraba a través de ellas , ayer muy entrada la noche había caído una tormenta, eso tomó desprevenidos a muchos, pero ahora el sol se asomaba juguetona entre los nubarrones a lo lejos, y amenazaba con más lluvia para lo largo del día, por las ventanas entraban amplias franjas de deslumbrante luz solar que
atravesaban las habitaciones y corredores del colegio, un ambiente húmedo y un aroma terroso invadía todo en los alrededores.

Harry aunque ayer se había acostado muy tarde, él fue el primero en levantarse esa mañana del sábado, esa mañana que tenía un ambiente húmedo e incómodo para la mayoría en el castillo, pero para Harry era el día más hermoso de todos, nunca antes había visto un amanecer más precioso, él a primera hora ya se había levantado Se vistió a la pálida luz del alba, y permaneció cerca de la ventana contemplando el paisaje de un nuevo día , todos aún dormían, el pelinegro dirigió una mirada fugaz hacia sus compañeros de habitación y todos estaban profundamente dormidos, Ron tenía la boca semiabierta y daba patadas de vez en cuando, tal vez estaba soñando con un partido de quiddicht, porque daba patadas y manotazos como defendiendo los arcos de Gryffindor, o tal vez se veía de nuevo enfrascado en una pelea como la de ayer, volvió de nuevo la mirada hacia el bello amanecer, esbozo una pequeña sonrisa en sus labios, sus verdes ojos le centellearon de felicidad, él se acomodó los redondos lentes que reflejaban el sol en el horizonte, él apretó los labios con emoción como tratando de contener la felicidad que quería manifestarse en forma de risas jubilosas, pero no podía hacerlo, ya que despertaría a todos, y además tenía que esperar a Ron para bajar a desayunar juntos , pero si fuese por Harry, él ya se hubiese dirigido a primera hora frente a la habitación de la castaña, pero no, no podía levantarla tan temprano, sin mencionar también que para los chicos estaba prohibido dirigirse en las habitaciones de las chicas,

Después de ayer su estado de ánimo dio una vuelta entera de trecientos sesenta grados, si, todo cambió, todo su mundo dio vueltas y vueltas, el cielo, el castillo, sus compañeros, los profesores, hasta los fantasmas del castillo , todo, absolutamente todo cambió para él, aunque en realidad todos seguían igual , pero ahora Harry los contemplaba de otra manera, era diferente, su forma de ver al mundo era totalmente diferente, porque ahora tenía a su lado a la chica más increíble y guapa de todo el mundo , y esa chica ahora era su novia, con tan solo pensar en ella su estomago le daba un vuelco, de tan solo pensar en ella su corazón se sobresaltaba a tal punto que creería que se le escaparía por la boca, ayer fue uno de los días más felices para él, fue tanta la felicidad que pensó que posiblemente ése sería el nuevo recuerdo para invocar su patronus, Harry rio levemente, " si ése será" pensó, ayer fue un día increíble para él, con tan solo pensar que estuvo al borde del colapso nervioso y que estuvo apunto de mandar todo a la mismísima Mier..., Harry dio un suspiro mirando el alba y tratando de olvidar eso , pero luego, de la nada, la chica de su sueños borra todos esos oscuros sentimientos con un beso, sí, un beso," y que beso!!! " pensó con ponderación, bueno... no fue un beso cualquiera, ése si fue un beso de verdad, ése beso fue increíble, que estuvieron apunto de desgartarse los labios, " vaya!!!" pensó Harry, la verdad nunca tenía tantas ganas de besar tanto a alguien cómo ayer, tenia tantas ansias contenida que casi la consumió por completo,

Harry frunció el ceño por unos segundos y miró ahora hacia la cabaña de Hagrid , Sí, él la beso con ansias, pero recordó un momento dónde él se había descontrolado, si, fue cuando Hermione enrosco sus dedos entre su pelo y lo jaloneo mientras se besaban, ése jalón de pelo lo descontrolo por completo, él recordó que eso le gustó mucho y lo hizo sentir algo increíble en su interior, disparando una nueva sensación que subía por todo el cuerpo , él nunca antes había sentido eso con ninguna otra chica, la sensación era genial y fuerte que dejó que su cabeza se ladeara ligeramente en sus manos, como cediendo a ella por completo, sí, en cierto modo ella podía hacer lo que quiera con él, y él no se opondria a lo que ella quisiera , y cuando jaló por segunda vez, sus sentidos estallaron, una electricidad le recorrió todo el cuerpo y "Wow!!!" pensó, eso se sentía increíble y perdió la cabeza, y en lo único que pudo pensar en ése momento, fue en que quería más de eso , Harry se mordió el labio inferior llevó la cabeza hacia atrás golpeando levemente el marco de la ventana y miró al techo, y pensó que ella había logrado someterlo con tan solo un beso y un jalón de cabello,

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