—¿Por qué viene usted tan callado, Malfoy? ¿Ha dejado usted el alma en esa casa? —preguntó Diggory a su amigo, después de haber andado algún rato.
—No tal.
—Sí; conmigo, fuera reservas; usted está enamorado, hijo mío, o algo le sucede de extraordinario, porque ha tenido usted singularidades que no pueden engañar a ojos tan expertos como los míos.
—Ya usted me conoce. Soy tímido delante de los hombres y mujeres, y esto es lo que me ha sucedido hoy. Ayer ha pasado lo mismo. Sabía yo que esta familia vivía en Hogwarts; que ella había estado en Inglaterra y que había tenido intimidad con la familia de mi padre, a causa de su parentesco. Pero yo no la conocía; pregunté por ella al llegar; me dieron razón y me presenté en su casa. Me recibió mi tía muy bien; pero pasados diez minutos de mi visita no sabía ya de que hablar, y mi permanencia allí fue un suplicio. Como usted ve, mi prima es bella; su vista me causó una impresión difícil de definir; deseaba alejarme de ella, y lo sentía al mismo tiempo. No sé cuántas barbaridades dije, y era que me preocupaba su belleza, esa belleza inocente y encantadora.
—Eso se llama amor, chico. ¿Ha estado usted enamorado alguna vez?
—Nunca; le confieso a usted que cuando era estudiante vivía entregado a los libros, visitaba pocas casas, y en ellas, aunque solía encontrar muchachos y muchachas hermosos, casi siempre los vi enamorados de otros, y esto naturalmente me hacía alejarme de ellos, así como a ellos interesarse muy poco en agradarme. Además, yo conozco que no soy simpático para los hombres y mujeres, no tengo esas dotes brillantes que usted posee en alto grado para cautivar el corazón. Mi carácter es sombrío y taciturno; ya usted comprenderá que hay motivo para que mi juventud se haya deslizado solitaria y triste. Le parecerá a usted ridículo, pero la verdad es que mi corazón está virgen de todo amor.
—¡Hombre! ridículo, no; pero raro, sí, muy raro. ¡Un corazón virgen a los veinticinco años! ¡En este tiempo en que ya a los doce se tiene novia o novio, y muchas veces querido! Convengo en que no haya usted amado, esta palabra ahora es convencional; pero habrá usted tenido una querida: ¿quién no tiene hoy, apenas llegada la pubertad, una triste querida?
—Tampoco; me hubiera sido eso difícil sin amar. Las pasiones de los sentidos no han sido hechas para mí. Como desde niño he carecido del dulce placer de sentirme amado, y como he atesorado en el alma un íntimo caudal de cariño tan ardiente como puro, he deseado con avidez amar; pero hubiera creído profanar mis sentimientos entregándome a las pasiones banales y que gastan la organización corrompiendo casi siempre el alma.
—¡Canario, y que singular filósofo es usted, Draco! Usted no pertenece a esta época. Es usted un casto soñador, un poeta quizá; pero de todos modos un hombre al agua. ¿Ha leído usted novelas?
—Pocas.
—¿Ha frecuentado usted a los poetas?
—Algo; pero le diré a usted: antes, muy antes de que me aficionara a ese género de lectura, pensaba y sentía lo mismo. Las ideas que tengo no me vienen de los libros, sino de las impresiones que he recibido desde mi infancia. He sufrido, y el mundo, que pudo haber sido para mí un edén, fue un infierno desde los primeros pasos. ¡Feliz quien como usted sólo ha pisado rosas en su camino!
—Como habíamos hablado pocas veces de este modo, le confieso a usted que no le había observado esta particular disposición al romanticismo, que ahora le noto, y de que le habría curado radicalmente, como de una enfermedad odiosa. ¿Quién diablos le ha puesto a usted hollín en el cerebro? ¿Quién le ha dicho a usted que este hermoso y querido mundo es un infierno? Sólo los tontos creen ya en el valle de lágrimas; y quéjese a su mal gusto aquel que quiera recibir la vida como un cáliz amargo. Pues qué ¿usted toma las cosas a lo serio?
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El joven oficial 1 (Adaptación)
FanfictionDraco era un alma solitaria y triste que solo sabía servir como militar. Harry era un joven de la aristocracia protegido y educado para servir a la alta sociedad. El día que conocen más del otro, el corazón de Draco no deja de estar inquieto. Advert...