Capítulo 24

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¿Qué hay detrás de aquella puerta? En los meses que llevaba Valentia trabajando para los Rosén, jamás había entrado a ese misterioso cuarto, pero tampoco se había preguntado qué escondería

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¿Qué hay detrás de aquella puerta? En los meses que llevaba Valentia trabajando para los Rosén, jamás había entrado a ese misterioso cuarto, pero tampoco se había preguntado qué escondería. Simplemente miraba la puerta.

-¿Observando? -Alek apareció provocándole un susto enorme.

-Próxima vez que hagas eso juro que te golpearé tan fuerte que no recordarás ni tu nombre.

-Pero te recordaré a tí -Ella sonrió yapenas se podía notar- Buenos días para ti también Musa- Valentia rodó los ojos- ¿Quieres ver lo que hay dentro?

-¿Hay algo?

-Si. Considero que algo muy importante.

-Pero no tengo llaves -Dijo con simpleza- Jamás me habían dado ordenes de limpiar aquí.

-Yo sí tengo -Mostró su mano y en ella había un juego de llaves- Es mi casa Musa, es obvio que tengo llaves de cada cuarto.

-Claro -Sonrió- Debí imaginarlo.

-¿Quieres entrar? Es última vez que lo pregunto.

Ella dudaba un poco, pero siempre había sido un persona muy curiosa- No es un cuarto como el de Christian Grey ¿Verdad?

Alek soltó una estruendosa risa- No, desafortunadamente no hay nada de eso.

-Bien -Dijo- Enséñame qué hay.

Alek suspiró y abrió la puerta, pero no se veía absolutamente nada. Entonces encendió una luz y todo cobro sentido.

-Son...

-Las cosas de mi mamá -Dijo delicadamente- Guardamos todo en este cuarto. Mi padre no quiso tirarlas, así que las sacó y se puso en este cuarto. Honestamente yo tampoco quería tirarlas, pero tenerlas a la mano sería poco sano... esto también lo es, pero aquí me siento cerca de ella -Valentia miraba con atención- Aquí venía de niño cuando me portaba mal, sentía que ella me perdonaba y me sonreía

-Ahora entiendo -Susurró- Por eso nadie venía.

-Solo mi padre y yo entramos.

Valentia comenzó a ver todo el lugar. Había ropa, mucha ropa de Alanna que estaba protegida con bolsas de plástico. Había un mueble lleno de perfumes, joyas y maquillaje viejo. También se encontraban muebles de color blanco. Al centro había una imponente pintura de ella.

-Tu madre tenía un guardarropa hermoso -Susurró y siguió viendo. También, sobre unos muebles y la pared había fotos de ella. Era una mujer muy hermosa, en cada una de sus fotografías se podía distinguir su alegría. Pero había una especial, una donde estaban ella, Aron y un Alek bebé en una pista de hielo- ¿Sabes patinar?

-No mucho, perdí práctica, pero mi mamá sí sabía.

-Yo también patinaba.

-¿En verdad? -La miró con atención.

Entre nosotros: Serás míoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora