Capítulo. 2 : Aprendiendo..

51 6 0
                                    

Cada mañana Julie y yo jugábamos en el edificio, ambas parecíamos monos, saltando por todos lados y escalando las paredes, ambas obtuvimos gran habilidad en eso. Ya habían transcurrido un par de meses y el dinero comenzaba a acabarse, estaba preocupada.

Julie - Vamos, no es tan malo como parece...

Rose - No voy a robar.

Julie - Rose, no nos quedará de otra, entiende.

Rose - Y si nos agarran?

Julie - No lo harán, Rose, entiende. No podemos trabajar aún y el dinero se está acabando, no quedará de otra.

Rose - No lo sé.....

Julie - Es fácil, yo te enseñó.

Rose - está bien... Pero con una condición.

Julie - Cual?

Rose - No nos separaremos, si agarran a una la otra ira con ella.

Julie - Esta bien.

Rose - Okay.

Julie comenzó a dar saltitos.

Yo solía atar mi largo cabello café claro en una trenza, mi cabello era lacio, mi piel era pálida o blanca como la nieve diría Julie y mis ojos color miel claro eran lo que me camufla entre la gente, Julie solía decir me que parecía una muñeca de porcelana, ya que tenía pecas.

Se acercaba el invierno haci que lo primero sería conseguir ropa calientita y más sábanas.

El truco era que una distraia a la gente mientras la otra tomaba las cosas rápidamente y se escondía en un callejón hasta que llegará la otra. Y haci lo hacíamos una y otra vez en diferentes tiendas, Julie era la que solía distraer a la gente.

Éramos muy buenas, aunque una que otra vez teníamos que escapar. Estaba aprendiendo a robar, yupi!

Hoy sería un pequeño basar de abrigos, lo último de la lista. Julie comenzó con la distracción, comenzó a fingir que se había lastimado, mientras yo metía algunos abrigos rápidamente a mi mochila. Cuando metí todo, corrí hasta Julie fingiendo temor.

Rose - Hermanita, aquí estas! Te estaba buscando!

-Quieren ayuda? - dijo una señora.

Rose - No muchas gracias, mis padres nos están esperando.

Levanté a Julie del suelo y salimos de la tienda con éxito. Nos metimos a un callejón a revisar nuestro motín, eran unos abrigos muy bonitos; sentía pena, pero Julie tenía razón, no nos quedaba de otra.

- Hey niñas hermosas, que hacen aquí solitas eh?

Rose - Nada que te importe zoquete!

- Tranquila nena, yo sólo quiero ayudarles a quitarse toda esa ropa..

Coloqué a Julie atrás de mí, ella se puso la mochila en la espalda y yo comencé a planificar nuestra ruta de escape.

Atrás de nosotras había una reja, un contenedor de basura y algunas cajas serían la escalera, atrás de la reja habían unas viejas escaleras de incendios que daban a las cornisas de los edificios, por suerte sabía cómo defenderme, el hombre cojeaba y él brazo izquierdo le temblaba, tenía al rededor de unos 45 años.

Julie salió corriendo hasta donde le indique, yo me deslize entre las piernas del hombre y luego me paré rápidamente detrás de él, era más alto, pero cuando le paté la pierna con la que le costaba caminar, cayó al suelo adolorido y fue cuándo aproveché y lo golpe detrás de la cabeza con una fierro de metal y corrí hasta mi ruta de escape.

My angel [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora