Conde Kurokawa ; Izana Kurokawa

❝ nueve

Al día siguiente, recién salidas las primeras luces del alba, Jane se despertó y busco salir de su casa lo mas rápido posible.

Después de hacer sus necesidades básicas y arreglarse, se dirige escaleras abajo hacia la cocina para tomar una manzana del frutero junto con un poco de pan. 

Justo cuando Jane pensaba irse de la cocina, observa a su hermano, Oliver, apoyado en el marco de la puerta.

—O-oliver... ¿Que haces despierto tan temprano? —pregunta Jane en un tartamudeo por haber sido tomada por sorpresa.

Su hermano mayor suelta un psss con una sonrisa burlona y una ceja enmarcada.

—¿No debería yo hacerte esa pregunta, Jane?

Ella forma una linea con los labios, y con algo de disgusto le responde. 

—Iré a tomar algo de aire fresco.

Oliver la sigue observando con una sonrisa burlona durante unos segundos, Jane por dentro tenia muchas ganas de irse sin mas.

Pero por fuera simplemente se mantenía con la manzana y el pan en sus brazos esperando con una sonrisa pacientemente la respuesta de su hermano mayor. 

Aun así, no podía negar que le estaba comenzando a molestar la forma en la que su hermano la observaba.

Como si solo estuviera jugando con ella, así lo sentía ella.

—¿A estas horas?

Otra pregunta, piensa Jane con algo de fastidio. 

Al final, se limita a sonreír amablemente y asentir. 

—Si, creo que me vendría bien. Iré con mi doncella, así que no tienes que preocuparte.

Oliver simplemente la mira con un semblante mas serio y va por un poco de leche.

Jane espera su respuesta por unos segundos mas, pero al ver que no dirá nada opta por irse.

—Cuídate. —dice Oliver cuando Jane esta afuera de la cocina, lo suficientemente fuerte para que ella lo escuche. 

Al salir de su casa, piensa en el corto encuentro que tuvo con su hermano. 

Desde hace un tiempo es costumbre que su hermano la tratara con algo de indiferencia e incluso fastidio. Ella nunca supo el porqué, ya que trataba de llevarse bien con el.

Pero parecía que el no quería lo mismo.

Suspira con algo de tristeza y sigue caminando hasta llegar al Serpentine. 

Cuando llega, busca un banco cerca del lago y disfruta de la soledad que le brinda el lugar a estas horas, ya que, al ser tan temprano, no hay muchas personas en el lugar y las pocas que hay se encuentras en gran distancia unas de las otras.

Jane sonríe al ver como las aves empiezan a aparecer cuando acomoda el pan en su regazo, comenzando a tirar pedacitos al aire mientras las aves comían. 

Mientras seguía alimentando a las palomas ella se permitió pensar en el baile de ayer, Ran era la primera persona con la que se sentía... Diferente. 

Verlo con Violet fue algo que le afecto mas de lo que debería.

Y el encuentro que tuvo con Rindou fue de lo mas inusual, nunca pensó que llegarían a compartir mas de unas pocas palabras con el.

Aun así, le pareció una persona interesante.  

También recordó lo difícil que fue ocultar como se sentía realmente durante todo ese tiempo.