De Iris

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El olor a medicinas, el dolor de cuerpo al intentar moverme, y la constante pulsación de mi runa de iratze, basto con pestañear tres veces para poder divisar donde estaba, Jungkook leía un libro mientras mantenía encendida su unión y su iratze, comprendí la razón del porque mi iratze estaba encendida.

-H-hola..-

-Hola, ¿te sientes bien?-

-Mjm, solo duele un p-poco-

-Como no, recibiste una paliza- dijo riendo un poco.

-¿E-están todos bien?-

-Si, nadie salió herido de gravedad-

-¿Y los demonios, los turistas?-

-Los demonios esta muertos, los turistas...Jin hyung les borro la memoria-

-¿Eran ustedes? Los que llegaron?- dije sentándome en la cama.

-Si, éramos Nam, Taemin y yo, estabas grave y con poca energía-

-Me llamaste amor...-

-Si...sobre eso...-

-Ya no lo hagas, nunca más-

La sorpresa en su rostro era algo que me esperaba, pero no iba a detenerme en lo que estaba por hacer, sabía muy bien que debía parar cualquier avance que hemos tenido, las cosas pasaban por algo, el aun tenía novia, y yo...no lo podría en riesgo de nuevo, ya no más.

A pesar de no querer alejarme de él sabía que era lo correcto, entonces solo así me quitaría un peso de encima.

-Lo que pasó, fue pasajero, yo cumpliré con protegerte y es todo Kook-

-¡¡Entonces no me llames así!! Para ti Park Jimin soy Jungkook-

-Jungkook...-

-Ya estas despierto, supongo que no debo quedarme más tiempo-

Definitivamente me había dolido lo que dijo, saber que estaba molesto era el remate perfecto, sin embargo sabía que así tendría un punto débil menos. Y el tenía una razón menos para morir.

Sabía bien el deber que debía cumplir, por las personas que ya no están y por las que si, a pesar de que tenerlo a mi lado es todo lo que necesito para sentirme completo se que también es aquello que me puede matar.

Con una lagrima recorriendo mi mejilla me levanté de la cama, mi cuerpo dolía, en mis piernas había ciertos hematomas, por la parte de mi vientre y cadera estaba un vendaje, a pesar de que el iratze seguía en función mi cuerpo parecía que no sanaba,  entonces pude comprender algo, después de todo o soy tan fuerte como creí.



-Es su hermana, Jennie, Jisso y Jennie son hermanas pero de diferentes reinos- (Nm)

-Solo hay u reino de demonios y es Edom, no puede haber más ¿o si?- (Jm)

-Si los hay, muchos más, 'pero no todos tienen acceso a nuestra dimensión, conozco solo otro y es Iris, pero nunca creí que pudieran pasar el portal a nuestro mundo- (Jn)

-Sea lo que sea, los demonios de Iris son fuertes, sus heridas son las que más han tardado en sanar- (Jm)

-Jimin...¿Cómo los mataste a todos? Eran cientos, no entiendo como es posible- (Rs)

Ni yo lo sabía, solo lo hacía, quería creer que solo debía liberar mi poder pero...¿Qué poder?...solo lo sentía como una fuerza que me llamaba a luchar, a acabar con el enemigo, pero yo no lo controlaba, solo salía, y al hacerlo causaba una gran devastación.

No dejaba de asustarme con cada uno de mis pensamientos, eran enojo, frustración, odio, tristeza, ver esos turistas y querer que murieran fue...fue como si odiara a todo el mundo y que quería que muriera.

Mientras todos discutían en la sala de control sobre lo que pasará, yo sentía de nuevo esa fuerza, como s por dentro me golpeara, me gritara y exigiera lo dejara salir, estaba pasando de nuevo, corrí a la sala de entrenamiento, ahí las salvaguardas mantendrían lo que sea que saliera de mi lejos de los demás.

DE pronto un sonido demasiado agudo afecto mis oídos, el techo de la sala de entrenamiento comenzó a caerse, varios niños que estaban ahí corrían peligro, por instinto y reflejos fui hacia ellos, pero nada nos lastimaba, una mano abrazaba a los niños y la otra pesaba sin cargar nada, solo mantenía firme algo, una runa, diferente a las que conocía, de ella emanaba un brillo peculiar, parecía cristal, los pedazos del techo chocaban contra ese brillo y se destruían.

Cuando ya nada caía la ayuda llegó, pero esa runa seguía en mi mano, activa y con el brillo a su alrededor, tenerla ahí me hacia sentir protegido, entonces un par de alas negras aparecieron en el espacio.

Eran ellas y solo ellas, no desperdiciaría la oportunidad, por mi mente corrió que esa runa nueva era un escudo de energía, por lo que corrí el riesgo de usarlo, mientras me acercaba a Jisso y Jennie mis alas se alzaron, dos contra uno no era justo, pero no importaba, éramos solo nosotros, el escudo parecía parar sus ataques pero sentía que se debilitaba con cada uno, mis esferas de energía eran fácilmente esquivadas por ellas, de pronto la runa en mi mano desapareció, solo me quedaba el combate cuerpo a cuerpo, tomé mi espada serafín y me dispuse a atacarlas.

Las alas dolían, estaban heridas, ellas me esquivaban fácilmente y de la misma forma me atacaban, todos estaban fuera de las salvaguardas expectantes, me alegra ser solo nosotros, sin nadie que corriera peligro, Jin intentaba quitar las salvaguardas para entrar y ayudar sin embargo las que había las había colocado yo, nunca podrían tirarlas.

Con mi visión borrosa, vi a la pequeña, una niña que lloraba bajo una mesa, no pudo salir de las salvaguardas y sabía que corría peligro, Jennie pareció notarla, iba hacia ella, entonces mi odio y enojo aumento, y de nuevo podía verme, en mi mente encerrado en mi mismo, como si estuviera atado de manos, no tenía control, solo de pronto me veía y a la ves estaba dormido fuera de mi cuerpo.

Ahora mi marca de energía no era amarilla, negra, viva como el fuego, pero siempre apagada, mis ojos estaban perdidos, mis alas parecían fuertes, recuperadas, mi Kimos era enorme suficientemente fuerte, más de lo que una ves lo fui, pero no era yo, yo no me estaba poniendo de pie, ni tampoco era yo el que con facilidad esquivaba los ataques de Jisso y Jennie.

-Mi-mira Jennie, a-al fin d-despertó, nue-nuestra c-creación- Jisso hablaba cortado ya que la tenía tomada por el cuello.

-Yo no soy tu creación, soy La creación- eso, no lo había dicho yo...



¡¡Hola!!

¡¡No me maten!! Se que me ausente mucho...pero digamos que entre como que en depresión y no tenía inspiración para escribir, y no les iba a poner algo todo chafa y sin emoción, discúlpenme, para compensarlos haré un maratón bien padriurix para que me disculpen.

¡¡Se me cuidan!! ;)



















ANGEL SUPREMO (KOOKMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora