capitulo 12

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Maddie

¿Extrañaba a Mathew? Si, y muchísimo. Pero sentía que no estaba lista aún para hablar con el, porque la "broma" que me hicieron no fué nada fácil para mí, jugaron con algo el cual es muy privado.

Nunca imaginé que Mathew sería capaz de hacer algo así, pero como dice el dicho:

"Caras vemos, corazones no sabemos"

Aunque en mi mente hay algo que aún no encajaba, pero ya llegará el tiempo de saberlo.

Era lunes y me desperté con ánimos de lunes, como siempre Cody despertándome, yo amaba a ese perro pero cuando hacía eso solía odiarlo.

Recordatorio: encerrar a Cody en el closet por las noches para que no me despertara.

Lo único bueno de los lunes es que me tocaban las clases que más me gustaban las cuales eran francés y literatura.

En literatura teníamos que hacer un poema, el cual no hice, así que tengo que improvisar. Baje las escaleras para ir a desayunar, cuando llegue me encontré a mamá haciendo pan tostado, huevos revueltos y jugo de naranja.

—Hola, mamá — le di un beso en la mejilla, tomé un plato y empecé a tomar todo lo que encontraba que se comiera.

—Maddie nisiquera he terminado de cocinar.

—lo sé —y me fuí al comedor.

Devoré todo lo que había en el plato, la verdad es que tenía mucha hambre, y eso podía notarse, cuando mamá llegó para ella desayunar yo había terminado.

—Alguien amaneció con apetito —mama me miró de reojo.

—Yo siempre tengo apetito —le eche una mirada extrañada.

Cuando estoy a punto de tomar mi mochila para irme escucho el timbre de la casa sonar, algo me decia que era Mathew el que estaba detras de esas puerta. Pero me lleve una sorpresa al abrirla, era Nathaniel.

Mi boca se abrió y formó una "o", casi que se me caía la baba, por suerte salí del trance al escuchar los pasos de mamá acercándose.

—¿Que haces aquí?

—Hola, Madd también es un gusto verte, tan radiante como siempre.

Odiaba compartir el sarcasmo.

Pero te tendrás que acostumbrar.

Tu deberías estar de mi lado.

El es más bonito.

Dejé mi pequeña discusión mental al escuchar la voz de mamá.

—Maddie ¿Quien tocaba el timbre?

—Nathaniel —rodee los ojos.

—¿El es el chico con el que ensayaste el otro día? —e hizo una comillas en el aire.

—Si ensayamos ¿Por qué haces comillas?

Si, soy muy mala mintiendo.

—Si, claro —se acercó a mi y me susurró al oído — está guapo.

Eso ya lo sabía.

Le di una mirada de pocos amigos, pero eso no era suficiente para que se fuera.

—Y... Nathaniel ¿Que haces aquí? —le pregunto mamá.

—ah si, cierto. Vine a avisarle a maddie que hoy no iban a haber clases; porque sucedió algo con la electricidad en la preparatoria y por eso hoy no habrán actividades académicas.

Invierno por siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora