Mis manos tiemblan, mi careta se empaña ligeramente, mi corazón late muy rápido y no soy capaz de emitir sonido alguno. Tengo miedo. Está todo muy oscuro y detrás de mí solo hay un vacío que se extiende por kilómetros. Hay rejas al frente, con luz que las traspasa. Gateo hacia ella, por el espacio tan estrecho que hay. Unos movimientos de sombra se asoman a la lejanía. El terror se intensifica y mi pequeño cuerpo tiembla. No quiero que me encuentren...
¡No me hagan daño!
* * *
Mis ojos se abren a la par, pero no tengo la fuerza para levantarme abruptamente. Me encuentro en mi cama, cubierta por mi cobija rosa. Al incorporarme, un intenso dolor de cabeza me ataca, ¡Rayos! Me duele mucho la cabeza.
Reviso la hora en mi celular y son... ¡¡¡Las 11:59 am!!!
¿Pero qué? Respondo mentalmente, mientras sujeto con fuerza el celular, como si esperara una respuesta de su parte. No estoy entendiendo nada.
Tras hondar un poco en mis recuerdos, la noche en la discoteca llega a mi mente, el baile en la pista... ¡Maldita sea, Grace! ¿Qué demonios me diste?
Tras tomar alguna de mis pastillas del tocador, me observo ante el espejo. Tengo unas ojeras horribles y el cabello hecho una maraña gigante. No tuve oportunidad de amarrarlo antes de dormir. Ni siquiera recuerdo cómo fue que llegué aquí.
Quiero estrangular a Grace. Sé que yo cometí el error de excederme, pero de entrada yo no quería hacerlo, ¿o sí? No lo recuerdo muy bien. Me cubro la cara de vergüenza, mientras veo a Petunia en su cápsula, con la esperanza de que ésta situación resulte menos incómoda.
¿Y si mis padres me vieron? No me queda más que ir con ellos a la cocina.
Cuando he terminado de vestirme, salgo por la puerta de mi cuarto y bajo las escaleras para llegar a la cocina. Una vez estando ahí, no hay nadie. Me resulta curioso la soledad de la casa.
— ¿Mamá? ¿Papá? —. Respondo, para ver si hay alguien de ellos cerca.
Busco por la sala y el estudio, pero no hay nadie dentro.
— ¿Grace? ¿Gerard? —. Repito la acción.
Busco por sus habitaciones, sin éxito.
Cuando estoy a punto de llamar a mi hermana con mi celular, la puerta de la entrada se abre. Se trata de Grace, quien estaba vestida con su traje espacial color celeste y con Tobey de su lado.
— ¡Hermanita! ¡Por fin despertaste! —. Responde ella, mientras levanta unas bolsas de compras. El canino se sienta a su lado.
— Grace... —. Es lo que le respondo, mientras coloco una mano en mis ojos, por la brillantez de la luz exterior.
— ¡No quería despertarte, te veías tan adorable durmiendo! —. Dice felizmente, mientras gesticula.
— Grace... —.
— ¡Sabía que si te levantaba temprano me matarías, así que no lo hice! —. Dice Grace, mientras coloca su dedo índice bajo el mentón.
— Grace... —.
— ¡Seguro me dirías "Vete de mi cuarto" o me lanzarías las cápsulas de Petunia a la cabeza! —. Argumenta.
— Gracie... —.
Bueno, ¿qué esta mujer no tiene llenadera? Yo muriéndome por la resaca y ella como si nada hubiera pasado. Su felicidad y entusiasmo son tan infinitos como el Universo mismo.
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ENAMORADA DE UN IMPOSTOR: UNA HISTORIA DE AMONG US
Science FictionLa historia nos presenta a Amy, una joven astronauta de color rosa que es asignada a trabajar como tripulante en tres lugares diferentes de la empresa MIRA, con un equipo de 10 astronautas, con la finalidad de estudiar nuevas formas de vida, entrega...