Té para tres [litcko]

03: El eclipse no fue parcial.

Luego de 2 días, la lluvia por fin había cesado. Las calles seguían todavía un poco inundadas, pero de igual forma debían de seguir con su trabajo.
Su padre tenia auto por lo tanto fue a su trabajo en este, y ofreció llevarlo pero en esos días no habían salido demasiadas propuestas. En el segundo día de lluvia, una señora lo había llamado para arreglar una gotera, y aun con poco conocimiento previo, fue. Lo malo fue que su padre ya se había ido, así que llego al hogar de la mujer empapado, y luego siguió la semana con un resfrío que casi no lo dejaba levantarse, pero lo hizo. Tenia que hacerlo.

Su padre había decidido seguir trabajando, aunque su madre había dicho que no lo haga, que ella podría buscan un trabajo y no le molestaría mantenerlo. No acepto, desde el primer momento sabia que esa no era una opción para el mayor.
Los días se sentían como una lenta cuenta regresiva que no dejaba de torturarlo. El primer pensamiento que generaba al despertarse era que un día menos para su padre estaba ahí, y no solo eso, cada día que despertaba podía ser el día donde todo se complicará.
Trataba de disfrutar cada segundo al lado de su padre, demostrarle que lo quería, antes de que ya no este mas a su lado, que su día no empiece con su padre cantando su nombre en broma para despertarlo, que no lo espere con un té o café y le cuente todo lo que debía hacer en el día.
La angustia solo crecía en su pecho. ¿Como podía disfrutar los momentos si al verlo a la cara solo recordaba que no faltaba mucho para no verlo mas? 
Había investigado mucho, su papá decía que estaba bien y que el doctor le dijo que la mayoría se sanaban, después de su investigación supo que era mentira. No estaba satisfecho con la información de Google, ya que siempre se caracterizaba por ser pesimista, todavía recordaba cuando había buscado porque le salia sangre de la nariz y Google básicamente le dio tres días de vida.
Trabajo varias horas para pedir una consulta con el medico de su padre, a escondidas agarro los estudios de su padre y se los llevo al doctor.
La explicación había sido peor de lo que había encontrado por Internet.
El cáncer de su padre era pulmonar, y aunque se encontraba en las primeras etapas, lo mejor para el caso hubiese sido tratarlo desde el primer momento. Se expandía sorprendentemente rápido, y aunque en pocos días se empezaría el tratamiento, las probabilidades de sobrevivir eran bajas. Era agresivo y lo iba a debilitar, tendría que dejar de trabajar e iba a pasar mas tiempo en el hospital que en su hogar.

Se fue del lugar luego de mas de media hora de consulta. Si cuando su padre le había dicho de su enfermedad sentía que se había roto algo en él, luego de esa consulta se sentía completamente destrozado. 
Caminaba sin rumbo, eran aproximadamente las siete por la tarde y tenia claro de que no quería volver a su casa hasta tener sus ideas claras, hasta poder mirar a su papá a los ojos y no llorar desconsoladamente enfrente suyo.
Mando dos mensajes:

"Ma, no vuelvo hasta la madrugada voy a cenar con los chicos y joder un rato, te amo"

" Pa voy a volver tarde, me junto con los chicos, te amo, cuidate"