Fandom: Marvel y Sherlock. Pareja: Jhonlock, Everstrange ⚠️: crossover mamalon.
Es inmoral, es incorrectamente correcto.
En el nombre del amor se pueden hacer muchas cosas. ¿No?
El nunca a sido inestable, obsesivo y mucho menos impulsivo. Siempre fue un alfa respetable.
Hasta que...
Eso pasó.
Comenzaron con pequeños sueños. Un omega, que olía a tomates frescos, rojos y apetitosos.
Primero pensó que se trataba de algún capricho, alguien que había visto y no había entendido lo suficiente.
Días después la situación cambió. Ya no era solo el olorcito a tomates, sino que la carita triste del omega.
Luego fue su nombre.
Su edad.
El lugar donde vivía.
Entre otras cosas asombrosas.
Al parecer el pequeño extrañaba a su alfa. Era un omega suertudo, seguía vivo a pesar de la muerte de este, y eso, ya era mucho. La marca en su cuello le daba cosquilleos cuando soñaba con Jhon, pues así se llamaba el de cabello gris.
Hasta que un día la cosa paro y Stephen se preocupo realmente.
Tarde o temprano tendría que hacer esto, lo sabía.
Cruzo el protocolos sin medida o arrepentimiento. Necesitaba del omega, necesitaba su olor y soñar con él. Por qué no, tocarlo.
Strange tambien supo que era un celoso de primera, los sueños pararon porque el omega decidio continuar y salir con una linda beta. Porque ya no lo estaba extrañando, porque ya no lo estaba llamando.
Ya que, aunque John no lo sabía, lo estaba llamando. Una conexión que dejaba ridículo al multiverso.
Se suponía que ese omega, Jhon, estaba enlazado con alguna clase de variante loca de él.
¿Quién deja a un omega como Jhon? Nadie. Solo un estúpido. ¿Que alfa normal se avienta de un edificio sin pensar en su pequeño y hemoso omega? Ninguno.
Stephen entendió tambien que el omega le golpease, que reclamara y le diera uno que otro golpe fuerte. Deduciendo así que tuvo épocas de soldado, incluso siendo un omega.
John, John, John. Cegado por el triste fantasma de su alfa creyó en Stephen. Era idéntico, era su alfa. El solo necesitaba sentir su aroma aunque actuara extraño.
—Empezemos de nuevo. —Le dijo. —No más casos, no más héroes y villanos. —acaricia sus cabellos y John se acurruca a su pecho. Le ama, le necesita.
Y Stephen jamás se ha sentido tan bien de ser un impostor. Pues este omega lo vale, demasiado para su variante, perfecto para él.
Lo besa, lo toma y sigue siendo perfecto. No hay manera de encontrarle hastío o siquiera pensar en el universo, tiempo y espacio. En esas barreras que no debería cruzar.
—Alfa. —le dice Watson. —Te amo mucho.
Stephen suspira y lo besa otra vez. Es adictivo.
—Quiero que tengamos un bebé y una casa y-
Stephen asiente mientras roza su pieles desnudas. Si existe otro hombre como él en su universo, no existe otro hombre como él.
Stephen le da un último beso antes de pedirle en un fino toque que se levante del lecho y el nido que ha armado para su alfa después del sexo.
La puerta del 221 de Baker Street está abierta y hay un tercer olor que conoce y a la vez no.
—Impostor, devuélveme a mi omega. —un alfa idéntico a él le reclama antes que los gritos alteren al omega que se queda confundido entre dos Sherlocks.
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Nota final: Este fic esa dedicado a Rosa lucio. Puse Strange x Ross, porque así no es como termina. Lo subiré a Wattpad como un oneshot. Ahí estará completo.
