Izuku Midoriya, hijo de la omega Inko Midoriya y del Alfa Hisashi Midoriya.
Este último lo abandono a el y a su madre al saber que era omega, aún recuerda ese día, se encontraba en la sala de espera del hospital, estaba sentado junto a su madre, completamente en silencio, ambos estaban nerviosos, sintió que estuvo sentado por horas cuando solo fueron 15 minutos, al escuchar la puerta abrirse ambos se levantaron de golpe, la doctora se sobresalto por el acto, pero les sonrió amablemente y les entregro los análisis en un sobre de color amarillo, madre e hijo hicieron reverencia, le agradecieron para luego comenzar a caminar a la puerta y finalmente salir de ahí, respiraron hondo y sonrieron victoriosos, se tomaron de las manos y comenzaron a caminar, querían llegar a casa lo más pronto posible para saber los resultados.
Caminaron tranquilamente por las calles de la ciudad para finalmente llegar al vecindario donde vivían, avanzaron unos metros más y finalmente estaban frente a su casa, su madre busco en su bolso de mano la llave, revolvía todo lo que estaba dentro para finalmente encontrarla, sacarla y abrir la puerta de su hogar, el pequeño chico de pelo verde entró primero, seguido de su madre que cerró la puerta detrás ella, atravesaron el pequeño jardín que tenían y se adentraron en su casa, ambos se quitaron los zapatos en la entrada y avisaron que ya estaban en casa, no había nadie, pero era la costumbre, pasaron a la sala y ambos se sentaron en el gran sofá color café.
El pequeño estaba emocionado, dentro de aquel sobre amarillo estaba el resultado de sus análisis de su segundo género, su madre sonrió al ver la emoción en el rostro de su amado hijo, la mujer miró el sobre y lo abrió con cuidado, saco los papeles y los leyo, estaba el nombre de su hijo y junto a este su segundo género, omega, sintió que su alma salía de su cuerpo los resultados que tenía entre sus manos no quería creerlos pronto llegaría esposo y una vez atravesara esa puerta pediría los papeles.
Aterrada por la información que acababa de leer, pensó en su hijo, ¿cuál sería la reacción de su pequeño izuku?, pero más importante ¿cuál sería la reacción de su esposo al haber concebido a un "hijo inútil"?, no podía asustarse, tenía tenía ser fuerte por lo que venía, tendría que proteger a su pequeño a toda costa.
Se armo de valor y comenzó a platicar con su hijo, aquello que le dijo le cayó como balde de agua fria al chico, no lo podía creer que había nacido como un Omega su padre la había dicho innumerable veces que solo servían para satisfacer a los Alfas y procrear hijos , esa tarde el chico lloro a mares, su único consuelo, su amada madre, lo animo un poco preparando su comida favorita, katsudon, el pobre niño no sabía lo que venia.
La tarde avanzo tranquilamente, solo con pobre chico triste que seguía sentado en la sala, su madre al ver la tristeza en la que se estaba sumergiendo su niño, se culpo por ello, pero como ya mencioné tenía que ser fuerte, la mujer se acercó a su hijo y le tocó el hombro, le dijo que tomara una ducha o se quedaría dormido, el niño asintió, este pensó que tal vez el agua lo ayudaría a despejarse un poco.
Subió a su habitacion, con los ánimos por los suelos, subió escalón por escalón hasta llegar a su habitacion, abrió la puerta lentamente y entró, miró uno de los posters de All Might que tenía pegado en la pared, su superhéroe favorita de la serie llamada My Hero Academy había una frase que le gustaba mucho "puedes convertir en héroe pues tus sueños lograr" el haber nacido como omega no definiría nada al diablo los prejuicios y estereotipos el sería lo que quisiera ser aunque fuera un Omega jamas se rendiría, el no se considera ese tipo de persona, el grito de su madre diciendole que si ya había salido de ducharse lo saco de su burbuja, rápidamente respondió que estaba buscando su ropa, saco un pantalón corto de tela suave color azul junto con una camisa color amarillo opaco y se metió al baño, lleno la tina con agua tibia, se quito su ropa y la metía en el cesto de ropa sucia y se metió a la tina.
Ya dentro comenzó a enjabonar su cuerpo, para luego lavarlo, por último su esponjoso cabello, lo lavo bien, terminó con su higiene personal y se paro de la tina, tomó una toalla y la coloco a alrededor de su cintura, camino hasta donde estaba su ropa y comenzó a cambiarse, terminó y abrió la puerta del baño colocando la toalla en cabello color verde.
Se aventó a su cama, mirando hacia el techo, se sentía fresco como una lechuga, todo estaba en silencio hasta que escucho la puerta principal abrirse, sabía que su padre había llegado.
- estoy en casa-. dijo el Alfa de los Midoriya, rápidamente el pequeño se levantó de su cama y salió de su habitación para recibir a su padre.
Estaba por bajar las escaleras cuando escucho a su padre decir quería ver el resultado de los análisis, aún no sabia como reaccionaria al saber que era omega.
Bajo lentamente, para cuando llego abajo, si padre ya había leído todo .-¿Qué?- dijo el hombre, para luego ver a su hijo que ya había bajado, lo miraba con despreció, decepción, ira, el pequeño niño se quedó paralizado por la sombría mirada de su padre.
.- Te lo advertí Inko, ya sabes lo que va a pasar -
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