Primer día en una escuela nueva, que podría salir, nada por supuesto estamos hablando del gran Bakugou Katsuki, el mejor en todo o al menos eso creía el, tomó una ducha rápida y se puso su uniforme, se admiro frente al espejo, escucho a su madre gritarle desde la cocina en el primer piso, tomó su mochila que estaba sobre una silla y bajo rápidamente, casi tropieza con uno de los escalones pero por suerte alcanzó a sujetarse del barandal de madera.
Sobre la mesa, un vaso de jugo de naranja, junto con un rico pan tostado untado con mermelada, bebió como loco el liquido dentro de vaso y como si fuese un animal comió el pan, su madre lo miraba horrorizada, había dado a luz a un hombre o a un animal, con esa actitud de vándalo jamás conseguiría pareja y mucho menos al muy lindo y respetuoso Midoriya Izuku, al menos ella así veía al chico, ella deseaba con todo su corazón que ambos terminaran juntos pero ya sería pedirlo mucho al universo.
Tocaron el timbre, la mujer recordó haberle pedido al peliverde pasar por la bestia que tiene por hijo, salio de la cocina cual rayo y abrió la puerta, parecía que tenía el sol justo en frente, la sonrisa del chico brillaba tanto-buenos días Mitsuki-san, he venido por Bakugou- la mujer grito a los cuatro vientos que saliera, que un lindo Omega había llegado por el, es escucho como el rubio tropezó y corrió hacia la entrada para ponerse los zapatos.
-me voy vieja-esta última solo miro con ojos asesinos-¿que?- dijo el cenizo, su madre le señaló su mejilla, un beso de despedida para humillarlo un poquito frente al Omega que lo había dejado sin palabras, este solamente gruñó y se inclino para besar a su madre, por que si Katsuki es más alto que su madre solo por un poco, eso le molesta a la rubia, cuando los labios de Katsuki tocaron la mejilla de su progenitora los despego rápidamente y se limpio, empujó para irse, no queria seguir siendo humillado-ahora si nos vamos- levantó su brazo en señal de despedida y finalmente se fueron.
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Iban caminando en completo silencio, cuando el pecoso comenzó a hablar-no tengo ningún interés en ti- pero que acababa de decir, ningún interés en el, un gran Alfa con un futuro brillante como héroe-tu olor te delata por completo que sientes interés por mi, de una vez te digo, no tengo ningún interés en ti, ni en ningún otro Alfa, así que no te hagas ilusiones- este Omega estaba loco o que, quien no estaría interesado en el gran Bakugou Katsuki.
Lo jalo y acorralo contra una pared-dímelo de frente maldito Omega- lo reto pensando que no lo haría, pero que sorpresa lo que salió de aquellos labios tan rosas y esponjosos-no tengo ningún interés en ti, ahora me harías el gran favor de soltarme- lo estaba rechazando y ni siquiera había comenzado a cortejearlo, con su mano libre lo rodeo por la cintura, espantando al pecoso con el acto y la cercanía que ahora tenían, podían sentir la respiración del otro, esto era de locos.
-eres el primero en rechazarme ¿sabias?- una risa burlona salió de esos hermosos labios-eso es bueno, tienes que aprender un poco de todo, por ejemplo el rechazo, ahora suéltame si no quieres terminar en el suelo, pensé que esto lo tomarías de forma más calmada y lograríamos ser amigos pero veo que no- apretó aún más el agarre de la cintura, que rabia le daba.
No había indicios de querer soltarlo y se hacia tarde para ir a la escuela, este lo miraba con un enojo inmenso, el rechazo era algo que el no conocía, todos los Omegas y Betas eran fáciles con el, le dirían de inmediato que si, si el les pidiera lamer su zapato, pero el no era de esos como para rebajarse por el.
Tenía un plan, se acercó lentamente al Alfa, la cercanía que tenían en esos momentos tenía que servir de algo, se acercó como si quisiese besarle para bajarle su guardia, una vez que el rubio había aflojado el agarre el pecoso aprovecho, alzó su pierna y lo lanzó de una sola patada, que piernas pensó el cenizo mientras caí contra el duro suelo.
Finalmente, Izuku se arreglo su ropa y comenzó a caminar, dejando tirado al rubio no sin antes voltear a verlo-levántate y vamonos, se hace tarde- cual resorte se paro de un solo brinco, ese Omega lo tenia a sus pies y ni un chancecito le iba a dar, que dolor de cabeza.
Pero no lo iba a dejar así, el también podía jugar, alcanzó al chico lo tomó del hombro y tomó su mentón, paso tan rápido que ni tiempo le dio de reaccionar al pecoso, sus labios se juntaron en un beso el cual dominaba Katsuki, intentaba abrir la boca del peliverde que se rehusaba a seguir, pero el rubio quería probar más de esos deliciosos labios, se sentía en el mismo cielo, de pronto sintió un dolor el chico le había mordido el labio inferior, dejando caer un pequeño rastro de sangre-ni se te ocurra volver a hacer eso, por que para la próxima te dejo noqueado en el suelo- se limpio con la manga de su suéter y camino dejando atrás a Katsuki, este se quedó parado a mitad de la calle.
Ese Omega sería suyo, definitivamente suyo, saco su teléfono para revisar la hora, se estaba haciendo tarde, corrió lo más rápido que pudo, pudo ver que Izuku ya estaba entrando, se apresuró y lo alcanzó-para desgracia mía, estarás en mi clase, así vamos- esas eran buenas noticias para el rubio, podría estar del chico.
Deslizó la puerta, primero entró Izuku seguido de Katsuki, todos los miraban sorprendidos, era raro ver al peliverde con Alfas que no fueran sus amigos-siéntate donde quieras, no me importa- diciendo esto se alejo para sentarse junto un semialbino, esto molesto al cenizo que sentó justo en la fila de a lado de donde estaba el pecoso, no dejarían que ningún Alfa se lo quitara.
Sería suyo.
Nuevo capítulo, yei
Que les parece, les va gustando.
Izuku se está haciendo el difícil y eso me gusta xd
Esto se va a poner chico
Pero bueno, espero le guste, muchas gracias por leer, enserió, me despido cuídense
Bye <33
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𝑓𝑖𝑟𝑠𝑡 ℎ𝑒𝑎𝑡 • 𝑶𝒎𝒆𝒈𝒂𝒗𝒆𝒓𝒔𝒆/𝑲𝒂𝒕𝒔𝒖𝒅𝒆𝒌𝒖
Fanfiction𝘚𝘰𝘺 𝘶𝘯 𝘮𝘢𝘭𝘥𝘪𝘵𝘰 𝘰𝘮𝘦𝘨𝘢 𝘪𝘯𝘥𝘦𝘱𝘦𝘯𝘥𝘪𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘤𝘰𝘯 𝘱𝘶𝘯̃𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘮𝘢𝘳𝘵𝘪𝘭𝘭𝘰, 𝘯𝘰 𝘮𝘦 𝘴𝘶𝘣𝘦𝘴𝘵𝘪𝘮𝘦𝘴 ⚠️𝘈𝘷𝘪𝘴𝘰⚠️ 𝘓𝘰𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘴𝘰𝘯𝘢𝘫𝘦𝘴 𝘯𝘰 𝘴𝘰𝘯 𝘮𝘪𝘰𝘴, 𝘭𝘦 𝘱𝘦𝘳𝘵𝘦𝘯𝘦𝘤𝘦𝘯 𝘢 𝘒𝘰𝘩𝘦𝘪 𝘏𝘰�...