Rabieta - • Ichimatsu • -

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💜 V I Ñ E T A 💜

No iba parar. Ojalá un automóvil lo arrollase en ese instante y terminaba con su miserable vida de una buena vez. Oía tu voz detrás. Aún insistías en alcanzarlo. No permitiría que siquiera lo hicieras. Mostrar su patética cara cubierta de lágrimas y traición, era lo menos que quisiera enseñarte. Aún así, subestimó por completo que recientemente tomaste fuerzas gracias a tus clases presenciales. Caminabas mucho más rápido que antes.

—¡Joder Ichimatsu, para! —El apretón en su muñeca evito su caminata—. ¡Deja de ser tan infantil y hablemos como los adultos que somos!

Estabas furiosa. Por supuesto, en cierto punto lograba entenderlo, ni siquiera te dirigió la palabra cuando decidiste irte sin siquiera darte la oportunidad de hablar. Te irritaba ser ignorada de esa manera. Eras demasiado orgullosa. No te irías satisfecha es día hasta ver que las cosas estaban aclaradas. Tenía miedo, y precisamente era por ello que no quería verte el día de hoy. Solo quería descansar en un parque y luego morir. Una petición simple y pacífica.

—No quiero... —La traición era palpable en cada expresión de sí. Estaba tan irritado que no podía controlar bien las emociones que reflejaban sus instintos.

—Es un compañero de la escuela, no entiendo porque... —Tus explicaciones no eran directas, eso era lo que precisamente se le hacia tan complicado de entender.

—¡Porque desde que estás en tu dichosa escuela no has volteado a verme ni una sola vez! —Su garganta dolió, pero en ese punto, eso era lo de menos.

Nada en él se encontraba estable. Su mente y su cuerpo parecían perder fuerza y valor. No podía mantenerse de pie por más tiempo, si no fuese por la fuerza que aplicaste, la caída al suelo hubiese dolido más. Era un ser patético, ya no quería verte a la cara. Solo deseaba llegar a casa y continuar llorando hasta morir. Por supuesto, la falta de espacio personal por parte tuya, fue algo que le tomó por sorpresa. Había olvidado que no te mostrabas incómoda ante esa clase de afectos con él. Quiso huir, pero sus muñecas estaban firmemente rodeadas.

—Te hirió que no no los he visitado recientemente, ¿cierto? —Tu mano había movido un mechón que molestaba en sus ojos. El calor incremento.

—Me puede importar menos que ni siquiera recuerdes a unas basuras inútiles como nosotros —No era el orgullo lo que hablaba, era su corazón herido.

—Ichimatsu, escucha... —No quería continuar oyendo parloteo. Te adoraba, pero la idea de saber que solo terminaría siendo engañado de nuevo dolía.

—¿Escucho que ya te has hartado de nosotros? —Su resentimiento volvió a tomar protagonismo—. Que ya te aburriste de tu juguete basura.

—No son juguetes —Esa seguridad que reflejaba tus ojos lo confundía tanto. Ese retumbar en su corazón que expresaba una clara ilusión. Era molesto.

—Yo era tu juguete —Era complicado retener las lágrimas—. ¿Conseguiste uno nuevo? —Su voz sonaba tan desastrosa que daba pena.

El sonido fue más rápido que la acción. No se dio cuenta al principio, sin embargo, ahora mismo, observaba a otra dirección y podía sentir que el calor iba incrementando en su mejilla. Punzaba a una velocidad increíble. Era la primera vez que era golpeado por ti. Inclusive las lágrimas habían parado de fluir. Lentamente regresó la mirada hacia ti. Esta vez, no solo él estabas llorando. Sin emitir ni un sonido, y con una mirada firme, no parecías tener la intención de pararlas. Lo siguiente que supo, es que ahora se encontraba rodeado por tus brazos. Una calidez que parecía haber olvidado gracias a la distancia que se había formado entre ustedes con el tiempo.

—NO eres un juguete, Ichimatsu —Replicaste con la misma determinación que al principio. Tu voz no se quebró en ningún momento, a pesar de expresar dolor.

—Eres molesta —Era tan débil. Siempre eras quien se acercaba a resolver los problemas, él solo sabía escapar y culpar. No te merecía. Nunca lo hizo.

—Y tú un niño caprichoso e infantil —Tus palabras no dolían. Era claro que lo merecía. Inclusive podría decir que sentía como una alegre nostalgia lo cubría.

Podría parecer todo un descarado, pero en este punto, ya no era algo que le importase. Unió sus labios contigo. Mordió, chupo y lamió. Primero inició en un ritmo suave, para luego convertirlo en algo ansioso y desesperado. Por supuesto, el contacto físico lo iniciaste tú. El roce de pechos, así como el abrazo que su cuello mantenía gracias a tus brazos. Estaba tan perdido, que no podía reaccionar con rapidez. Tu mano ahora alejaba su propio rostro de ti. El gruñido que escapó de sus labios le hizo dar cuenta que estaba perdiendo la paciencia. Tu mano tembló ante la fuerza de su cabeza dura queriendo retomar el contacto. Una punzada en cierta área de su cuerpo le impidió continuar con la lucha por regresar a tus labios.

—. . . —Observó hacia abajo un par de segundos antes de regresar su mirada hacia ti—. Se levanto... "eso" —Perdió la intención de captar tu atención. Vergüenza.

—Soy molesta —Increíble. El recuerdo fresco de esa frialdad que se apoderaba de ti al sentirte ofendida era algo que golpeaba de nuevo en su cabeza—. No me necesitas, Ichimatsu~.

Tal vez debería aprender a ser menos orgulloso cuando ni siquiera sabía la otra mitad de la historia.

💞 -/ >u< -/ 💞

¡Ya extrañaba a este maldito gato! xD💜
La abstinencia es mala para cualquier Matsu saludable(?xD
Gracias por llegar hasta aquí, en serio, agradezco el apoyo que dan aún cuando yo soy la que se va de parranda:')

¡Bonita semana a todos!💜✨

✨💕Derechos al artista del artwork💕✨Si saben quien es, favor de comentarlo porque ando bien perdida🙏🏻

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¿Te quedarías conmigo? - • OneShots Osomatsu-san • -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora