🎒ONE SHOT🎒

291 31 0
                                    

El cumpleaños de Tanjiro

Todos sabemos que es un cumpleaños, la mayoría de las personas esperan ese día con ansias, pues ser el centro de atención, comer pastel, recibir regalos y pasar el día con las personas que quieres, es una gran forma de celebrar el aniversario de tu nacimiento, como la mas típica, pero hay otras personas que desprecian o ven con completa indiferencia este tipo de fiestas, lamentablemente el rubio entra en la segunda categoría no por amargado, si no porque el nunca a celebrado su cumpleaños y para el esta fecha no tiene ningún tipo de relevancia por otro lado esta, Tanjiro, que cada cumpleaños su madre le hornea un pastel especial, es una pequeña reunión donde puede jugar con sus amigos como sus hermanos teniendo un día de felicitaciones.

Aquel año no sería diferente pero ahora tenia un nuevo amigo, era la oportunidad perfecta para presentarle a su familia y tal vez el pueda conocer a algún familiar del rubio pues aun que son amigos desde hace un año, ninguno conoce a la familia del otro, bueno, esto solo le pasa a Tanjiro, ya que nunca habido un día en donde el pequeño, Kamado, no le habré de su familia a su amigo. Era mucha emoción, sus padres y hermanos ya querían conocer a aquel chico tan misterioso del que habla, hasta Inosuke quería conocerlo, la ilusión de ver a Zenitsu conocer gente nueva era mucha, a demás solo seria una fiesta, ¿Qué es lo peor que puede pasar?

Zenitsu- Lo siento, pero no creó poder ir- se lamento al oír la invitación del contrario.

Tanjiro- p-pero, ¿porque?- tartamudeo un poco.

Zenitsu- No tengo permitido salir de casa, tampoco hay alguien que pueda llevarme, lo siento- se disculpo mientras volteaba a ver al niño a su lado.

Tanjiro- oh, lo entiendo, entonces te traeré una bolsa de dulces - exclamo resignado, viendo por un momento como la cara de su amigo parecía dudar de algo, pero prefirió no preguntar.

DOS DÍAS DESPUES

Inosuke- ¡¿COMO QUE, MONITSU, NO PUDO VENIR?!- grito indignado al oír la historia de su mejor amigo.

Nezuko- al parecer sus padres son muy estrictos- dijo con pena, ya que ella tampoco conoce al rubio, lo ha visto, pero Tanjiro siempre le dice que es alguien muy tímido y le da miedo asustarlo.

Tanjiro -Pero no importa, mañana le llevara algunos dulces, al final no es su culpa no poder venir- dijo, intentando comprender la situación de su amigo.

Kie- ¡NIÑOS, VENGAN A COMER PASTEL!- llamo la atención de los pequeños para que se dirigieran a la mesa donde se encontraba el delicioso postre.

EN OTRO LADO

Noe- ¿para qué necesitas 500 yenes? - pregunto ni siquiera mirando al pequeño que se encontraba al frente de ella.

Zenitsu- hay un trabajo en la escuela y necesitamos comprar material, si no llevo el dinero es posible que me quiten un porcentaje de mi calificación- explico, sin embargo su madre ni siquiera le voltio a ver -también es posible que te llamen a dirección- con esas palabras logro lo que quería

Noe- mi bolso esta en la cocina y el dinero esta contado si agarras mas de 500, te castigare- amenazo, mientras el otro solo agradeció secamente. 

AL DÍA SIGUIENTE

los nervios lo carcomían vivo, Zenitsu siempre era el primero en llegar pero aquel día se estaba demorando mucho, estaba muy preocupado pues lo mas seguro es que se haya enfermado pero antes de que sonara la campana de entrada el rubio apareció por la puerta acompañado de una caja de colores brillantes, quería preguntar lo que era pero la maestra había llegado, ahora tendría que esperar al recreo. 

Zenitsu- Feliz cumpleaños- felicito acercando con una mano la caja, a la cara del contrario, su expresión era  indescifrable para Tanjiro, pues este se encontraba con la mirada baja, pero por algún motivo su olor se había vuelto mas dulce.

Tanjiro- Gracias, Zenitsu- agradeció entusiasmado tomando entre sus manos aquella caja.

Con notoria emoción abrió la caja para encontrar un pequeño pastel, el betún que lo cubría tenia decoración de cuadros verdes y negros mientras que arriba decía feliz cumpleaños, el olor que desprendía era delicioso una combinación de chocolate y fresas, curiosamente su favorita.

Zenitsu- Lamento no poder asistir a tu cumpleaños- se disculpo nuevamente levantando su mirada hacia el otro, dando una pequeña sonrisa.

Un sentimiento de alegría casi indescriptible se adentro en su pecho, era la primera vez que presenciaba la sonrisa de Zenitsu el siempre mantenía una expresión neutra y cuando se encontraba feliz agachaba la cabeza, pero al estar sentado a su lado en aquel momento vio algo que con simpleza el describiría como hermoso, aun que era mejor, los sentimientos se mezclaron en su cabeza, el rubio no era muy diferente a los demás, no tenia una belleza envidiable por los dioses ni mucho menos una forma de ser que enamorara a cualquiera en su camino y sin embargo en aquella sonrisa encontró una alegría inimaginable una que se le contagio, una que quería volver a ver. 

Tanjiro- Por cierto, te traje dulces- hablo saliendo de su burbuja mientras le entregaba una bolsita al contrario.

Ese día, Zenitsu, probó los dulces por primera ves, sobra decir que Tanjiro no dejo que ninguno de sus hermanos se comiera el pastel, le daba lastima no compartirles pero por algún motivo comer de ese postre lo así sentir especial, eso sonaba raro pero deseaba que ese sentimiento durara lo mas posible.  

ZENZENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora