MY HISTORY ~SIRIUS BLACK~

7. El inicio de un atardecer.

-No puedo creer que nos hayamos quedado dormidas- Lily seguía quejándose a mitad de la clase.

-Tranquilízate Lily, en la tarde pedimos los apuntes, a parte solo fue clase con McGonagall y Slughorn, eres de sus favoritas no creo que te digan nada- dijo Emily hablando bajo ya que el profesor Binns estaba dando clase y odiaba que lo interrumpieran.

-Si, pero aun así no puedo creer que nos hayamos perdido dos clases, sabes que eso puede afectar mis calificaciones- contesto Lily tratando de prestar atención a la clase.

-Ay Lily, por favor tranquilízate, no es para tanto- dijo Emily un poco más alto.

-Señorita Potter, veo que ha entendido perfectamente bien el tema, porque no viene al frente y da la clase- dijo molesto el profesor Binns, pues era la tercera vez que Emily lo interrumpía en toda clase.

Molesto el profesor mando a Emily con la profesora McGonagall a que le diera un reporte y le bajo 10 puntos a su casa. Emily salió del salón "en busca de la profesora" pero realmente se dirigió al gran comedor donde se encontró a su amiga Pandora.

-Hola Pandora- dijo Emily tomando asiento en la mesa de los Ravenclaw.

- ¿Quieres un poco? - pregunto la chica rubia, señalando una tarta de chocolate.

-Seguro ¿Lo has hecho tú? - pregunto Emily sirviéndose un poco de tarta.

-Si, estoy aprendiendo a hornear; y dime... ¿Qué tal esta?

-Está muy rico Pandora- dijo Emily pasando el pastel, que para ser sinceros sabia a cartón -Aunque creo que le falta algo.

-Si, creo que debí ponerle chocolate en vez de esa planta rara...

Emily volteo a ver a su amiga algo preocupada, Pandora era una chica muy linda; pero era algo... diferente, cosa que provoco la risa y el disgusto de muchos. Emily la conoció en tercer año, justo cuando dos chicas intentaban arrebatarle un hermoso vestido que Pandora traía entre sus manos, Emily le quito a esas dos chicas de encima y advirtió a todos que si se metían con Pandora; se metían con ella, fue desde ese momento en el que ambas se hicieron amigas.

[...]

Terminadas las clases, todos regresaron a sus salas comunes, pero Sirius decidió salir a caminar un rato pues dijo que se sentía agobiado de tantas clases y quería estar un tiempo a solas.

Mientras caminaba rumbo al lago negro vio a una chica a la orilla del lago con los pies sumergidos en este tratando de lanzar piedras para que estas rebotaran, decidió acercarse para averiguar de quién se trataba, pero solo era la hermana de su mejor amigo.

-Así no es- dijo Sirius acercándose a Emily, quien ignoro completamente su presencia y siguió lanzando piedras.

- ¿Qué quieres? - pregunto Emily molesta volteando a ver a Sirius, después de que este hiciera hasta lo imposible por llamar su atención.

-Saber qué haces aquí- dijo Sirius -Y enseñarte a lanzar piedras porque tal parece que no sabes cómo hacerlo.

-No es de tu incumbencia- contesto Emily volviendo a lanzar piedras.

-Así no es.

-Ya me lo has dicho- dijo Emily.

Sirius se quitó los zapatos para después entrar al lago negro, se colocó detrás de Emily y suavemente tomo su mano enseñándole la manera correcta de lanzar la roca para que esta rebotara.

-Ahora tu- dijo Sirius dejando que Emily lo hiciera sola.

-Muy bien...- dijo Emily tomando la piedra y lanzándola tal y como Sirius le había mostrado - ¿Así? - pregunto riéndose al ver que había fallado.

-No, definitivamente no- dijo Sirius riéndose junto a ella.

Durante un instante ambos se miraron uno a otro, sintiendo una fuerte conexión, algo que jamás habían sentido. Era ese momento en el que ambos reían y parecía reinar paz y tranquilidad a su alrededor, fue como si el mundo se detuviese solo un instante para ellos dos.

Pero inmediatamente apartaron la mirada...

-Quería ver el atardecer- dijo Emily saliendo por completo de sus pensamientos.

- ¿Qué? - pregunto Sirius, pues este aún se había quedado vagando por su mente.

-Preguntaste porque estaba aquí- explico Emily.

-Si, es verdad... ¿Planeas quedarte aquí hasta que aparezca?

-No te estoy pidiendo que te quedes, si es lo que piensas- rio Emily.

-Igual lo haré- dijo Sirius.

-Como quieras- contesto Emily.

Después de un rato, aquel atardecer qué tanto habían esperado salió, a Emily se le iluminaron por completo los ojos, no era la primera vez que veía uno, pero amaba verlos, eran su paisaje favorito; en cambio a Sirius le encanto ver esa emoción en el rostro de Emily, ver como aquellos ojos color avellana se embriagaban con aquella vista tan hermosa...

-Es hermoso ¿No? - pregunto Emily aun viendo aquel atardecer.

-Si... lo es...- contesto Sirius viendo más a la chica que tenía a su lado, que a él atardecer.

[...]

Después de pasar la tarde juntos, ambos regresaron a la Sala Común, James se extrañó de ver a su mejor amigo y a su hermana juntos pues estos a pesar de que se hablaban, no solían pasar el tiempo juntos pues cada que lo hacían siempre terminaban disgustados uno con el otro, en cambio esta vez regresaron riendo muy amenamente.

Pero de igual manera decidió no tomarle mucha importancia y ordeno que todos subieran a la habitación para planear la próxima luna.