Mis Experienzas en mi RD [Tokyo Revengers]

Reloj

Tokyo parece una ciudad tranquila!-dijo hanma estirando sus brazos mostrando una sonrisa

Si, algo así - dijo shyna

Oye bájate de ahí, siempre que venimos aquí, siempre te paras en ese mismo lugar - dijo hanma

Así aprecio más la belleza que puede tener este mundo - dijo shyna

Al menos no te acerques tanto a la orilla puedes caerte - dijo hanma

Lo se - dijo shyna

Como sea - se apoyo en aquel concreto alado de shyna - como vas con eso? - pregunto hanma

Demasiado bien a decir verdad, parece que South inta amenarme con algo nuevo - dijo shyna

Y eso será con? - dijo hanma

Asesinar a Emma, la traerá hasta aquí y la matar frente a mi - miro hacia abajo - algo simple, que cuesta demasiado - dijo shyna

Matar a Emma, ya veo - dijo hanma

Si, el pensara que con eso, tal vez yo esté dispuesta a aceptar que se deba de aumentar los tráficos de drogas y esas cosas - dijo shyna

Oh tal vez, así le puedas dar el puesto del líder, así todos le obedecerán - dijo hanma

También podría ser eso, mostrarme bedil, eso también quiere - dijo shyna

Los pedazos de ojas caían al suelo, uno por uno era dejado en el suelo. Los pequeños botes de pintura eran tirados al suelo y arrojados por la habitación, manchando el suelo, las paredes y las cosas que se encontraban cerca. Aquellos papeles limpios eran manchados, los bocetos que había hecho eran desgarrados y rompídos en pedazos.

Los pinceles se encontraban en el suelo, la habitación estaba desordenada, algo no muy común.
Los floreros y frascos de vidrio que habían estado en el escritorio ahora era pedazos que se encontraban en el suelo.

Shinra - llamó kazutora del otro lado de la puerta

Que no quiero a nadie cerca! Acaso no escuchaste hanemiya?! - grito Shinra con enojo

Vamos Shinra, solo déjame ayudarte - dijo kazutora

Y en que me vas ayudar?! En llevarme la maldita contraria?! Solo vete con manjiro! - dijo Shinra

Mikey no tiene nada que ver en esto - dijo kazutora

Que vayas de aquí! - grito Shinra quien lanzó un frasco de vidrio contra la puerta ocasionando que este se erompiera en pedazos y callerna al suelo

Kazutora no hablo más, tan solo bajo las escaleras y se fue del hogar. Dejando solo y en profunda soledad al menor de los Akade.