Una vez un piloto de avión se disponía a volar cuando de pronto escuchó un chillido en la parte trasera de su asiento, al agacharse se dio cuenta que era una RATA.
No podía retrasar el vuelo para bajarla, entonces recordó que las ratas no resisten las alturas y emprendió el vuelo.
Conforme iba subiendo el avión disminuian los chillidos, hasta que desaparecieron.
MORALEJA: Cuando escuchemos chismes o críticas negativas acerca de nuestra persona, simplemente no le hagamos caso y volemos más alto.
RECUERDA: LAS RATAS NO RESISTEN LAS ALTURAS! ... por eso caminemos en el aire porque en la tierra hay millones de ratas.
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Fabulas
Short StoryAquí encontraras muy buenas historias con moralejas... Para diversion o para un trabajo... Leelo y deja tus opiniones....