𝐓𝐡𝐞 𝐌𝐚𝐫𝐚𝐮𝐝𝐞𝐫𝐬|| 𝐎𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬

Remus Lupin

Lo que está en cursivas son recuerdos.

—Sirius, ¿Que le sucede al profesor Lupin? —preguntó Harry, al ver a Remus subir las escaleras con el rostro decaído.

—Verás Harry, tú tía y Remus, tuvieron un romance en la escuela y un día como hoy murió tu tía —dijo Sirius recordando a T/n —Deberías ir y hablar con Remus, tal vez te cuente algo sobre ella.

—Está bien —murmuró Harry, subiendo las escaleras para entrar en la habitación del hombre lobo.

Al entrar encontró a Lupin sentado en el borde de su cama, con un cuadro en sus manos y la cabeza baja.

—Profesor...? —dijo Harry, lo que hizo que Remus subiera la mirada y limpiara sus lágrimas levemente.

—Harry, sabes que ya no debes llamarme profesor —recordó Remus para que el menor de los Potter olvidara la anterior escena.

—¿Está bien? —preguntó Harry entrando lentamente en la habitación.

—Si, me imagino que Sirius te contó lo de tu tía y yo —murmuró Remus, recordando lo entrometido que era Sirius en su relación.

—No quisiera ser entrometido, pero quisiera saber cómo era mi tía.

—Tú tía, era una mujer, inteligente, graciosa, optimista, un poco obstinada, extremadamente hermosa y muy parecida a tu padre.

—¿Y cómo fue su relación con ella? —preguntó un poco tímido.

—Bueno nosotros nos conocimos...

—¡James, James, James! —exclamó una niña de once años corriendo buscando entre compartimientos a su hermano —¡Te encontré! —dijo la niña al encontrar a su hermano con tres niños más —Hola!

El pequeño Remus se había quedado embobado al ver a la pequeña niña.

—¡T/n! ¿Dónde estabas? —preguntó James viendo a su hermanita.

—Tú te fuiste sin mi! Y lo peor es que ni siquiera me presentas a tus amigos —recriminó T/n viendo a los demás niños.

—Bueno, El es Sirius, Remus y Peter —dijo James señalando a cada uno.

—Hola! A todos soy T/n.

—Hola! —dijeron todos cuando la menos de los Potter se presentó. Ahí se empezaba una hermosa amistad.

[..]

—Vamos Remus, cúbreme con Minnie —suplicó T/n quien ahora tenía catorce años.

—Está bien solo que —Remus no pudo terminar ya que la chica le dio un beso en la mejilla.

—Gracias Remi, eres el mejor —la menor de los Potter se fue dando pequeños saltitos.

[..]

—Vamos Remus, solo dile a T/n lo que sientes —dijo Sirius empujando a Remus.

—Está bien —pero antes de que se pudiera acercarse a la chica, ella se acercó a ellos, le plantó un beso en los labios a Remus y salió corriendo.

Remus quedó sorprendido por lo que acababa de pasar pero la chica regresó.

—Remus, me gustas y por eso te besé, si tienes algo que decirme al respecto por favor encuéntrate conmigo en la sala común —y con eso volvió a salir corriendo.

—Te dije que también le gustabas —dijo Sirius agitando a Remus para que reaccionara pero no podía.

[..]

—En serio Remus, te amo, y no me importa si eres hombre lobo o vampiro, te amo y siempre te amaré —dijo T/n porque Remus le había dicho que terminarán por su condición peluda.

—Eres lo mejor que me ha pasado en la vida T/n Potter —murmuró Remus atrayéndola para besarla.

[..]

—No te separes de mi, ok? —dijo Remus tomando a su prometida de los hombros.

Dumbledore los había mandado a proteger a unos muggles de los mortifagos y Remus debía proteger a su prometida a toda costa.

—Está bien cariño, no me va a pasar nada —murmuró T/n tranquilizando a su próximo esposo.

Después de un rato lograron derrotar a todos los mortifagos, pero faltaba alguien.

—James! ¿Donde está T/n? —preguntó Remus a su amigo.

—No se, no estaba contigo?

—N-

—¡Avada kedavra! —exclamó una voz desconocida.

Al llegar al lugar a Remus se le partió el corazón a la mitad, el amor de su vida, su alma gemela, su prometida, su primer amor. Había muerto, al llegar encontraron a T/n Potter muerta.

Remus se arrodilló en el piso, agarró la cabeza de T/n en sus manos y lloró desconsoladamente.

—No, no, no, por favor no me dejes, no puedo vivir sin ti —suplicó Remus.

—Remus, debemos irnos —dijo un miembro de la orden del fénix, agarrándolo por el hombro.

—No! no, hace frío, a T/n no le gusta el frío, debo quedarme con ella, para que no tenga frío —lloró Remus abrazando el cuerpo sin vida de su prometida.

Todos estaban devastados, James, Sirius y Remus, habían perdido a una persona muy importante.

Al llegar a la base de la orden del fénix, estos tres merodeadores restantes, subieron a sus habitaciones.

Remus al llegar a la habitación, lloró más, ese cuarto era el que compartía con T/n, su T/n pero ella se había ido para siempre.

—Y días después tus padres murieron —murmuró Remus terminando de contar el relato.

—Gracias por contarme sobre mi tía, señor Lupin —dijo Harry para después salir del cuarto.

—De nada...