El atardecer asomaba ligeramente, al igual que Víctor. Alan, sin más, decidió ir a verla. Tocó timbre y abrió. Fue muy diferente a las anteriores veces, sus miradas no se hallaban como imanes, simplemente eran uno. Él se arrimó a la puerta justo delante de ella, sus labios se abrazaron cálidamente, sus dientes pellizcaban suavemente los de ella, mientras cerraba sus ojos, y desvanecía todo su cuerpo sobre el de él, quien con sus manos bajaba acariciando toda su delgada espalda hasta la cintura alzándola sobre su pierna, cerrando la puerta e ingresando al hogar.
No recuerdo, mi mente se bloqueó por el accidente.
- ¡Mentira! – elevó su voz, Víctor – dime, ¿dónde está Elena?, ¿qué le has hecho?
¡No hice nada! Cómo le voy a hacer daño alguien que supuestamente amo... ¿o amaba?
- "¡Maldito hijo de...! – alzando su puño y a punto de ejecutar - ¡o me dices o no sabes lo que soy capaz!"
Me vas a matar, estás demente. Su puño impacta fuertemente cerca de mi ojo derecho.
- Empieza a hablar – muestra las cartas y lee –
"Si miras a alguien que no sea yo, tus ojos serán cegados, Si tus labios acarician otros que no sean los míos, entonces deberé bordarlos, Si sientes algo que conmigo no, esa alma debe ser condenada"
Eres un enfermo mental, un psicópata, dime ¿qué le hiciste?
Alan preparaba todo para su viaje a la cabaña en la costa. Otro fin de semana, para inspirarse, aunque esta vez acompañado. A penas Víctor condujo a su trabajo, Elena empacó su maleta, y dio una visita a su vecino.
- ¿Lista? – pregunta el escritor contento y recibiendo una sonrisa como respuesta.
Sabes que creo, que todo esto es idea tuya. Claro, como no lo deduje antes. Tú me chocaste el auto, mientras me iba con ella. Querías que olvidara todo, para acusarme de que fui yo, quien le hizo daño a Elena.
- No, no, no, ¡Nooo!, ¡fuiste vos, Alan!
Quieres hacerme considerar que fui, pero estás equivocado. Me secuestraste Víctor para pensar que algo le he hecho. Jamás le lastimaría a Elena, en cambio, tú sí. No soportaste que no te quisiera, que no te amara como me ama a mí. Tú eres un enfermo. ¿¡quién es el secuestrador, el que me tortura!?, ¿¡el que se quiere vengar por no aceptar la realidad!?
- ¡Cállate!, ¡Cállate! – agitado Víctor - ¡mientes!, ¡tú eres el psicópata aquí! Estas cartas son de un perturbado.
¡No! Es amor, algo que no le diste a ella. No la vas a tocar ni ver más. No la mereces, te lo juro por mi hija.
- Así que recuperaste la memoria. Ya no sigo tu juego. ¿Dónde está? -seriamente establece Víctor.
Eso mismo me pregunto, ¿Qué has hecho con Elena? Luego del accidente, antes de traerme aquí.
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Cicatrices Profundas #AA2022
Misterio / SuspensoLuego de un accidente, un escritor despertará en un lugar totalmente desconocido, estando amnésico, lo culparán de un hecho atroz, solo el pasado será el encargado de abrir las cicatrices profundas para revelar la verdad.